¿ROPA INTERIOR O EXTERIOR?
La moda más íntima se exhibe de forma sensual a través de encajes y transparencias en prendas de estilo romántico o bien en atuendos de espíritu gótico.
La lencería nació en Francia a finales del siglo XIX para liberar a las mujeres de los corsés de la época y las actrices de la industria del cine fueron las encargadas de darle ese toque glamuroso, exhibiendo la ropa más íntima en fastuosos escenarios. Prendas como camisones, túnicas y kimonos elaboradas en hermosas telas ligeras de satén y seda que favorecían el movimiento y conjuntos que evocaban sensuales juegos de transparencias a través del tul y el encaje. Sea cual fuera el motivo y el uso de la moda lencera, esta fue creada desde la intimidad para permanecer oculta tras las capas externas de ropa visible.
Desde hace algunas temporadas, la lencería reivindica su espacio fuera de la esfera privada para explorar otros ámbitos donde se pueda mostrar sin pudor, y las pasarelas dan fe de esta nueva tendencia exhibicionista. Cada diseñador se aferra a un estilo diferente para mostrarnos cómo la ropa íntima puede convivir con la moda prêt-à-porter a través de outfits otoñales, más o menos ponibles a pie de calle. Por ejemplo, los hay como Valentino, Saint Laurent y Dior, que pretenden mostrar una visión rebelde de la mujer a través de provocativos looks que utilizan telas de red, bodies de efecto glossy y prendas de tul y encaje, que se dejan entrever en vestidos y blusas. Otros como Prada, Marc Jacobs y Tom Ford abrazan el estilo romántico y regresan a su esencia más clásica a través de atuendos elegantes con tejidos semitransparentes que muestran las prendas íntimas desde la sensualidad. También se aprecia un retorno al estilo gótico, con firmas italianas como Fendi y Gucci, que muestran prendas lenceras integradas en outfits con complementos y accesorios de piel desde la elegancia, como propone la firma capitaneada por Silvia Venturini Fendi, o desde la transgresión, como propone Alessandro Michele, a través de piezas acharoladas o arneses de piel combinados con la lencería. Al margen del estilo, hay una regla que cumplen la mayoría de diseñadores a la hora de presentarnos el nuevo estilo lencero: la ropa íntima se asoma en riguroso color negro.