Sistema transportador de Ferag
El fabricante suizo Ferag AG, especializado en sistemas de manutención intralogísticos, ha instalado en la planta de producción del fabricante italiano de repostería Forno Bonomi un sistema transportador easychain compuesto por 10 líneas y un total de tres kilómetros de cinta transportadora. La fábrica, con una superficie de 40.000 m2, se encuentra en la localidad de Roveré Veronese (Italia).
Ante la creciente demanda de sus productos, Forno Bonomi decidió ampliar su producción y adaptarla a las exigencias del mercado internacional. Para implementar la tecnología de transporte que les permitiese integrar los distintos procesos productivos y logísticos de final de línea, la empresa veronesa recurrió a Ferag, especialista en soluciones intralogísticas. La elección final recayó en el sistema easychain por varias razones. Por un lado, y en relación con la transferencia de productos del empaquetado primario al secundario, este sistema transportador ya había dado muestras de su gran eficacia en las instalaciones de numerosos productores en el sector de la alimentación - Gennari, Mondelez y Nestlé-. Por otro lado, la tecnología easychain, con sus inconfundibles placas negras y amarillas, ofrecía una serie de características especiales que para Forno Bonomi eran sumamente importantes.
El punto de partida lo representa la tecnología de transporte desarrollada por Ferag. El sistema transportador easychain se basa en una cadena apoyada en rodillos de muy baja fricción, que además de facilitar el movimiento, permite que el sistema funcione con tan solo unos pocos motores. Aunque la cinta tiene una longitud de más de tres kilómetros y un total de 20 espirales, basta con 35 motores de 0,75 kW para accionar el sistema transportador de toda la planta de Roverè Veronese. Incluso ofreciendo una alta capacidad de transporte, el sistema de Ferag apenas necesita mantenimiento. Este último aspecto es fundamental en el transporte de productos frágiles como las galletas y resto de producto de repostería. Otro aspecto importante es
que los componentes móviles de la cinta transportadora no requieren lubricantes; de ahí que el sistema easychain sea ideal para el sector alimentario. Sin contar, además, que este sistema es especialmente eficiente también en el plano energético, lo que se traduce en un bajo consumo de energía. Este aspecto también fue determinante para los responsables de Forno Bonomi. De hecho, la empresa ofrece, cada vez más, productos Bio destinados a una clientela con una fuerte conciencia ecológica y, por tanto, dan una especial importancia a la sostenibilidad y al respeto del medioambiente.
ESPIRALES PARA LA TERCERA DIMENSIÓN Aparte de lo mencionado, otros factores influyeron para que la balanza se inclinara a favor del sistema de Ferag. Uno es que la tecnología easychain admite radios de curvatura muy reducidos; algo nada desdeñable en la planta principal de Forno Bonomi, donde gran parte del transportador se eleva a varios metros del suelo. Gracias a esta disposición se gana en espacio, que puede destinarse, por ejemplo, a más almacenamiento o a que los trabajadores puedan moverse sin obstáculos. De este modo, los productos se transportan primero hacia la parte superior y luego bajan por espirales compactas. En la planta de Forno Bonomi, justo después de la primera estación de empaquetado, diez líneas easychain reciben las galletas envueltas en film y las transportan por una espiral hasta el piso superior, situado a cuatro metros de altura, donde se encuentra el área de producción, equipado con diez hornos. Con ello, finaliza la primera etapa de la cinta transportadora.