Defensa expulsa del Ejército al soldado miembro de ‘la Manada’
Alfonso Jesús Cabezuelo estaba en servicio activo sin posibilidad de asignación de destino
El miembro de la Manada Alfonso Jesús Cabezuelo Entrena, soldado del Ejército de Tierra, ha sido expulsado de las Fuerzas Armadas tras su condena a nueve años de cárcel junto a los otros cuatro jóvenes sevillanos por los abusos sexuales a una joven madrileña en los Sanfermines de 2016.
El joven se encontraba en la actualidad adscrito administrativamente a la Subdelegación de Defensa de Sevilla, en la situación de servicio activo sin posibilidad de asignación de destino, según informó ayer el Ministerio de Defensa.
El comunicado emitido por el departamento de Margarita Robles señala que en virtud de la sentencia número 38/2018 de 20 de marzo de la Audiencia Provincial de Navarra, y en aplicación del artículo 10.2 de la Ley 8/2006, de 24 de abril, de Tropa y Marinería, modificado por la Disposición final cuarta de la Ley orgánica 8/2008 de 4 de diciembre, de Régimen Disciplinario de las Fuerzas Armadas, se incoó un expediente administrativo por una condena a Alfonso Jesús Cabezuelo por un delito doloso que “se ha resuelto con la resolución del compromiso” que tenía adquirido con las Fuerzas Armadas hasta la edad de 45 años y la pérdida de su condición de militar.
Así lo establece la Resolución 562/1849/18 de 19 de octubre publicada en el Boletín Oficial de Defensa (BOD) de ayer. La baja surtirá efectos “administrativos y económicos” a partir de hoy, un día después de su publicación en el mencionado boletín, según la resolución que firma el general jefe del Mando de Personal, Teodoro Baños Alonso.
Inicialmente, desde el momento que se tuvo conocimiento de la situación procesal tras la comisión del delito, el soldado Alfonso Jesús Cabezuelo pasó a la situación de suspenso en funciones, hecho que no conlleva el cese de su pertenencia a las Fuerzas Armadas.
El Ministerio también justifica que se le reingresara al servicio activo tras su puesta en libertad. Así, Defensa señala que una vez acordada por la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Navarra la puesta en libertad inmediata de los cinco condenados por la violación en los Sanfermines, y en función del “imperativo” del artículo 111.2 de la Ley 39/2007, de 19 de noviembre, de la Carrera Militar, “tuvo que decretarse su pase a la situación de servicio activo”. En virtud del artículo 111.3 de la misma Ley, se acordó por los órganos competentes la prohibición de obtener destino, añade.
La expulsión de Cabezuelo de las Fuerzas Armadas contrasta con la situación administrativa en la que se encuentra otro de los miembros de la Manada, el guardia civil Antonio Manuel Guerrero Escudero, quien según explicaron ayer fuentes de la Guardia Civil no podrá ser expulsado del instituto armado hasta que se produjera, en su caso, una sentencia firme condenatoria. Desde la Guardia Civil apuntan que el caso de Antonio Manuel Guerrero es distinto al del militar de la Manada, quien tenía un Compromiso de Larga Duración (CLD) con las Fuerzas Armadas, hasta que cumpliera la edad de 45 años, lo que ha permitido a Defensa rescindir dicho compromiso, de acuerdo con la ley de Tropa y Marinería. La figura del contrato temporal no existe en la Guardia Civil, por lo que la baja del joven no podría materializarse hasta que la condena fuese firme, en su caso, según el artículo 3.2 de la ley de la carrera militar.
Al igual que Cabezuelo hasta ahora, el joven Antonio Manuel Guerrero se encontraba en la situación administrativa de servicio activo aunque no se le había asignado ningún destino.
Los cinco jóvenes sevillanos que fueron condenados a nueve años por un delito continuado de abusos sexuales con prevalimiento están a la espera de los recursos presentados contra la condena y precisamente el Tribunal Superior de Justicia de Navarra se reunirá el 7 de noviembre para deliberar sobre los recursos.