Tiran cuatro patinetes eléctricos en la muralla medieval de Carretería
La Policía Local los retiró casi cuatro horas después de ser avisada por un vecino del Centro El Ayuntamiento afirma que los restos, catalogados como BIC, no presentaban daños
El conflicto surgido en los últimos meses con los patinetes eléctricos explotados en régimen de alquiler por varias empresas privada aumenta su gravedad. Si durante semanas los vecinos del Centro histórico, principalmente, se han quejado del aparcamiento irregular de muchos de estos vehículos de movilidad personal en las aceras y zonas peatonales, ahora ele- van la voz para denunciar que cuatro de los patinetes, pertenecientes a la empresa Tier (una de las cuatro que opera en la capital de la Costa del Sol) aparecieron arrojados sobre la muralla medieval situada en la calle Carretería. Unos restos que tienen la consideración de Bien de Interés Cultural (BIC), por lo que el acto vandálico podría tener consideración de atentado contra el patrimonio.
De acuerdo con la información aportada por este colectivo, en el momento en que uno de los vecinos tuvo constancia de lo sucedido dio aviso a la Policía Local por medio de una llamada a la salda del 092 alrededor de las 15.13. Hubo que esperar casi cuatro horas para que varios agentes se personasen en el lugar para retirarlos vehículos.
Los detalles del diálogo mantenido por el residente que se puso en contacto con la Policía Local con la operadora del 092 da buena muestra de la indefinición con la que el Ayuntamiento de la ciudad puede actuar ante el fenómeno de los patinetes. Son varias las ocasiones en las que la interlocutora policial, ante la insistencia del vecino, se escuda en la ausencia de “una normativa que diga que tenemos que quitar eso... ni ninguna ordenanza municipal”.
“Si va una unidad para allá quién abre”, se preguntó la operadora del 092, ante lo que el vecino apuntó que debe existir algún personal municipal que disponga de una llave para poder acceder a ese tramo de la muralla, que se encuentra delimitado por una valla. Ante la insistencia del vecino, la operadora accedió a realizar una consulta al jefe de sala. Tras dos minutos de espera, la operadora repitió el discurso inicial, en el sentido de que la Policía Local no puede actuar “porque el patrimonio está cerrado; cuando abran dirán que vayamos para allá”. Ante la reticencia inicial, el vecino señaló su interés por que se abriese un atestado por parte de la Policía Local.
“Es un caso de vandalismo y alguien tendrá la responsabilidad”, dijo el vecino, ante lo que la operadora se limitó a contestar: “De momento no tenemos ninguna responsabilidad”. Este periódico se puso en contacto en la tarde de ayer con el concejal de Seguridad, Mario Cor tés, quien tras informarse sobre lo ocurrido, aseguró que se iba a enviar una unidad a la zona. Así ocurrió antes de las 19:00, cuando los agentes pudieron retirar los cuatro patinetes. Y ello a pesar de que, como explicó el concejal, no se pudo contactar con nadie que tuviese las llaves para abr ir el recinto vallado. De acuerdo con la primera inspección, no se detectaron daños en los restos de la muralla. A pesar de ello, se enviará un infor me a la Policía Nacional, al poder tratarse de un delito contra el patrimonio.