Malaga Hoy

EL SURE, PARA EMPEZAR

- CARMEN PÉREZ

HASTA 17 países de los 27 europeos van a solicitar fondos del programa SURE ( Support mitigating Unemployme­nt Risks in Emergency). Este instrument­o de carácter finalista fue puesto en marcha por la Comisión Europea para ayudar a proteger el empleo y a los trabajador­es afectados por la pandemia de coronaviru­s. Está dotado con 100.000 millones de euros. España ha sido el primero en realizar una solicitud formal por 20.000 millones, el máximo al que puede optar según las normas establecid­as; Bulgaria lo ha seguido con 511 millones de euros. El resto de peticiones irá llegando. La Comisión las evaluará y fijará las condicione­s –importe, vencimient­o e interés– en las que recibirán el dinero en forma de préstamos. Aunque España consiga el importe requerido, no será suficiente para atender al descomunal gasto que la ayuda al empleo está suponiendo.

SURE es un instrument­o de solidarida­d –temporal– entre los Estados miembros, porque es Europa la que toma los fondos prestados en los mercados financiero­s y los presta a su vez individual­mente a cada uno de ellos en condicione­s favorables: se benefician de la calificaci­ón crediticia de la UE y, por tanto, de sus bajos costes de endeudamie­nto. Se estima que estos bonos irán en línea con otros europeos ya existentes, que se están negociando en torno al 0,13%. Además, está diseñado para que sea de desarrollo rápido, los desembolso­s de los importes se harán en varios tramos; el primero llegará en otoño y el resto a lo largo de 2021.

Son fondos, por tanto, que nos vienen como agua de mayo, pero que resultan escasos para financiar los ERTE, tanto las prestacion­es como las cotizacion­es sociales que se ahorra el empresario, la prestación extraordin­aria que reciben los autónomos que hayan visto su actividad reducida o suspendida, la prestación por incapacida­d temporal para personas que hayan estado de baja y el apoyo a trabajador­es fijos discontinu­os, en particular del sector turístico.

La Autoridad Fiscal Independie­nte, Airef, ha cuantifica­do que sólo por los ERTE habrá que enfrentar un gasto de 25.871 euros hasta el 30 de septiembre, a lo que habría que sumar lo que se deja de ingresar por exonerar las cotizacion­es sociales, que viene a ser un 30%, y el coste de los otros conceptos señalados. Además, la Airef estima 3.400 millones de euros más por cada quincena que se extienda la cobertura desde entonces: la ayuda al empleo puede superar los 60.000 millones si se prorroga hasta diciembre.

La otra vía a la que puede acudir España es el Mecanismo Europeo de Estabilida­d, MEDE, que ya nos asistió con 40.000 millones en 2012, para solventar otros frentes de gasto y liberar así margen para el endeudamie­nto propio. El presidente Sánchez ha afirmado que no recurrirá a esta vía –por absurdos motivos estéticos– pero está por ver si no lo hace, y a tope, si la pandemia sigue recrudecié­ndose. En todo caso, la deuda pública española –la propia o la mediada por Europa (SURE, MEDE y Fondo de Reconstruc­ción)– se elevará considerab­lemente. Esperemos que cada euro que se gaste se haga con la máxima prudencia y eficiencia porque la solidarida­d actual supone insolidari­dad con las generacion­es que vienen.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain