El nuevo delegado del Gobierno, positivo en Covid
El delegado del Gobierno de España en Andalucía, Pedro Fernández, ha suspendido la agenda prevista para los próximos días tras dar positivo por coronavirus. Tras tener constancia de un positivo en su entorno cercano, Fernández solicitó la realización de un test PCR, cuyo resultado dio positivo e “inmediatamente” lo ha comunicado a sus contactos estrechos, en cumplimiento de los protocolos establecidos por las autoridades sanitarias. tilde Cañelles, bióloga especializada en inmunología del CSIC, explica en efecto que “se piensa que puede evadir parcialmente la inmunidad de las personas que han pasado la enfermedad”. Hasta aquí lo conocido de esta B.1.258 o variante eslovaca.
Hay otras dos variantes detectadas en Andalucía que sí provocan la inquietud de los investigadores. Se trata de las variantes sudafricana (B.1.351) y brasileña (P.1). De esa preocupación dan fe dos circunstancias. La primera es que España tenga vetados los vuelos desde Sudáfrica y Brasil desde el 2 de febrero y que durará, como mínimo, hasta el 27 de abril. La segunda es que el Gobierno haya encomendado al Ejército la vigilancia y el rastreo de ciudadanos de esas procedencias. El interés estratégico de estas dos variantes es un hecho.
En Andalucía su detección es testimonial, pero los virólogos desconocen aún qué resultado puede tener su convivencia con la variante británica, es decir, cuál prevalecerá en la lucha por la supervivencia de las diferentes cepas actualmente circulantes.
De la brasileña, la investigadora del CSIC afirma que es la que “más preocupa”. En Brasil, apunta, “hay mucha gente joven en la UCI, pero sigue sin estar claro si es por su naturaleza particularmente virulenta o por la mala gestión del Gobierno de Brasil”, explica Cañelles, que tiene expectación por la revisión de un ensayo hecho en Manaos (Brasil) del que resultó una altísima proporción de reinfecciones en la población.
Mientras la ciencia da con la tecla, lo cierto es que la situación actual en Brasil es sísmica. Más de 4.000 muertos diarios y una disparada incidencia acumulada alumbran allí la última ola, sólo de menor intensidad que en Chile, del que se ha elogiado la velocidad de la campaña de vacunación. Perú y Uruguay también han empeorado el escenario y, como Chile, son limítrofes de Brasil. El mayor problema de la variante brasileña, aparte de que se transmite más fácilmente y de que parece que provoca enfermedades más graves, es que se muestra resistente al efecto de las vacunas. Esta variante ha sido secuenciada residualmente en Sevilla.
El tipo sudafricano se asemeja al brasileño. Ambas variantes comparten una mutación en la espícula, que es la proteína de la corona vírica que hace de llave para encajar en la cerradura de las células respiratorias. También es más transmisible y reduce “la efectividad de algunas vacunas”, describe el Ministerio de Sanidad. Además de en África y en el cono sur africano, Sanidad avisa de “importante presencia” en algunas regiones de Austria y de Francia. Hay quienes achacan a este tipo del coronavirus el disparo de las olas pandémicas en estos países de los últimos meses. En Andalucía, ha sido detectada en varias provincias: Sevilla, Granada y Córdoba, entre ellas.