La derecha abre la vía judicial y se recrudece el fuego cruzado político
● Vox y Cs presentan sendos recursos al Supremo contra los indultos ● Abascal acusa a Sánchez de dar “una puñalada por la espalda” al Rey ● El Gobierno se declara “tranquilo”
PP, Cs y Vox se preparan para la batalla judicial contra los indultos de los presos del 1-O, mientras aumenta el tono del ataque político contra la excarcelación ya consumada.
Ciudadanos dio ayer el paso, al presentar Inés Arrimadas un recurso ante el Tribunal Supremo a título personal, junto al actual portavoz naranja en Cataluña, y José María Espejo, diputados del Parlament en 2017 y, por tanto, “perjudicados directos”, como han argumentado en el recurso, que ha sido admitido a trámite por el Alto Tribunal.
Aparte, la formación naranja ha pedido medidas cautelares para que los nueve indultados el miércoles vuelvan de manera inmediata a prisión, mientras se resuelve el procedimiento.
Arrimadas defendió que sus derechos y los de sus votantes “fueron pisoteados”, insistiendo en cargar contra Sánchez por “sacar a la gente de la cárcel por sus ideas” y por conveniencia propia.
El líder de Vox, Santiago Abascal, también se presentó ayer ante el Supremo, pero sin explicar el contenido del recurso que han presentado, aunque por lo que han contado estos días, basan su legitimidad para presentarlo en haber sido acusación popular en la causa del procès, aparte de que se van a querellar contra todos los ministros.
Abascal acusó a Sánchez de haber cometido “un acto de corrupción” con la aprobación de los indultos y de haber dado “una puñalada por la espalda” al Rey.
La ofensiva del PP contra los indultos tuvo ayer otro frente en la recogida de firmas frente al Congreso contra esta medida de gracia. Espera llegar al medio millón este fin de semana, sumando una reivindicación más, la dimisión de Sánchez y la convocatoria de elecciones.
Y mientras los nueve condenados por el procés, ya en libertad, mantienen sus reclamaciones de amnistía e independencia, desde el Gobierno, Sánchez se limitó a pedir “concordia” a todas las fuerzas políticas y territorios.
María Jesús Montero, portavoz del Ejecutivo, fue más allá al pedirles que reconduzcan su discurso en favor del diálogo y la convivencia, y, en este sentido, fuentes del Ejecutivo temen que la campaña que puedan hacer los independentistas pueda ser “una losa” para el Gobierno como también temen que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos les pueda dar un tirón de orejas por “unas penas no proporcionadas”.
En relación con la ofensiva judicial de la derecha, Montero aseguró que están tranquilos, aunque criticó sobre todo al PP por trasladar “permanentemente” a la justicia cuestiones que son políticas y de la mesa de diálogo, aún sin fecha, dijo, que los tiempos se están acelerando, pero advirtiendo que a esta mesa hay que ir con propuestas viables y dejar las posiciones “extremas”.
Otra cuestión que desde el Ejecutivo se dejó clara, en este caso por parte del ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, es que “bajo ningún concepto” contemplan conceder
Arrimadas considera que sus derechos y los de sus votantes “fueron pisoteados”
Santiago Abascal
Presidente de Vox
Sánchez mintió a los españoles y compra voluntades de los partidos golpistas”
un “indulto anticipado” al ex presidente de Cataluña Carles Puigdemont, huido de la justicia.
Otras fuerzas nacionalistas opinan que los indultos son un buen punto de partida, como subrayó ayer el presidente del PNV, Andoni Ortuzar, quien recomendó a los partidos independentistas actuar con “gradualidad” en este escenario difícil.
El líder jeltzale consideró que el “camino” del diálogo debe estar basado en “tres pilares” que son “el reconocimiento de que Cataluña o Euskadi son dos naciones”, la bilateralidad entras las dos partes, y las “garantías” de que, en caso de conflicto, éste se solucionará con diálogo.