La mala racha del Valencia
● Los de Alex Mumbrú acumulan cuatro derrotas consectuvias, tres de ellas en la Euroliga
La exigencia de la Euroliga, que duplica la carga de encuentros con respecto a un equipo solo dispute la liga doméstica, no es ajena al Valencia. El equipo taronja recibe mañana al Unicaja envuelto en una espiral de malos resultados. Con la derrota ayer ante el Zalgiris Kaunas ya van cuatro seguidas . Se podría pensar que, en términos temporales, está siendo un mal mes para los valencianos, pero todo esto se ha producido en menos de diez días.
Entre el 17 y el 25 de noviembre, el calendario se ha compactado para que al Valencia le dé tiempo a visitar la pista de la Virtus Boloña y caer por un contundente 89 a 59, la del Tenerife para un 94 a 78, y recibir sin premio al Real Madrid (73-80) y al Zalgiris Kaunas (7680) en último lugar. Tres encuentros de Euroliga y uno de ACB que caen del lado de los rivales, con unos guarismos preocupantes para un equipo del potencial ofensivo del Valencia, solo 71,5 puntos de media en esas derrotas.
Precisamente el Unicaja acumula 71,3 encajados por encuentro, algo que será clave en el encuentro de mañana. La Euroliga, aunque suene a topicazo, es lo que tiene. La competición condiciona las sensaciones y racha de un equipo es cuestión de días. En ese sentido, la BCL es un ecosistema más amable para los clubes, con menos partidos y más espaciados entre sí, por lo que una derrota puede mitigarse con mayor facilidad que en el sistema Euroliga.
Antes de visitar a la Virtus de Sergio Scariolo, el Valencia era un transatlántico a velocidad de crucero. Los de Mumbrú acumulaban seis victorias en ocho encuentros. También sacaron victorias de mérito en pistas complicadas, como la del Olympiacos y Anadolu .