LA CRUELDAD CON GAYÀ Y EL CRITERIO BALDE
Resultaba demasiado tentador escribir de “Twitch Enrique”, de la versión cercana, canalla, divertida o didáctica del seleccionador, aprovechando para saludar a Amunike o para felicitar al fenómeno de seguridad que ganó la última porra, explicar tácticamente la inexistencia del falso 9 o recordando el famoso codazo de Tassotti, que tuve la gran pena de vivir in situ en el Mundial de Estados Unidos, cuando llegar a cuartos de final se consideraba un fracaso del equipo español, algo que ahora se quiere valorar como éxito.
No tengo la menor duda de que la noticia del regreso de José Luis Gayà a España cayó como una puñalada en el seno del equipo nacional. Imposible no empatizar. Las lesiones forman parte de la vida del jugador, pero ninguna lesión tan leve resultó más inoportuna y dolorosa. La crueldad más absoluta se cebó con el capitán valencianista, que festejó como pocos su presencia en la lista y que llorará mucho en su viaje de vuelta a la capital de Turia, mascullando su infortunio y dándole vueltas a la decisión de su entrenador. Luis Enrique tomó una decisión lógica, que no es comparable con el COVID asintomático que padeció Busquets en la Eurocopa. Con todo el dolor de su corazón, no puede arriesgarse a quedarse sin un segundo lateral izquierdo.
La elección de Alejandro Balde como sustituto también tiene su aquel. No cabe duda de que sus condiciones futbolísticas son excelentes y su momento de forma es el apropiado. Incluso, el hecho de mantenerse activo con la selección Sub-21 resultaba un punto a su favor. Sin embargo, la disparidad de criterios de Luis Enrique es llamativa. Si se trataba de traer a alguien que conociese el camino, el elegido debería haber sido Marcos Alonso. Si se trataba del mejor lateral de LaLiga hasta la fecha, entonces el bético Álex Moreno merecería ocupar ese lugar. La guardería está llena en Catar.
El “Mundial del streamer” va a dar juego, titulares y temas de conversación que resten presión y foco negativo a los jugadores. Entretanto, nos agarramos al aura de Ansu, ojalá en modo “Oliver y Benji’’, al momento de Asensio y rezaremos para que nuestros centrales no tengan que defender demasiado. Los experimentos, para Twitch.
NINGUNA LESIÓN TAN LEVE RESULTÓ MÁS INOPORTUNA Y DOLOROSA PARA UN JUGADOR