El Barça sale invicto de Kiel
BALONMANO PRIMERA VUELTA DE LA CHAMPIONS El ‘clásico’ europeo lo dominaron los azulgrana, estuvieron a punto de perder y acabó en tablas
El clásico del balonmano europeo entre THW Kiel y Barça no decepcionó, aunque quizá ningún equipo acabó satisfecho. Durante cincuenta minutos largos dominó el Barça, con ventajas de entre cinco (1015 la máxima) y tres goles. Pero en apenas cuatro, en los que recibió un parcial de 5-0, se le escapó la victoria. Con todo en contra salvó un punto que no premia merecidamente el buen partido que hizo, pero le mantiene invicto completada la primera vuelta de la fase de grupos.
Los dos últimos ganadores de la Champions midieron su estado. El Kiel llegó con una malísima novedad, la baja de su lateral Eric Johansson, en gran forma, que se rompió una mano en el último entrenamiento. Lo acusó su equipo, sobre todo en la primera mitad, en la que naufragaron sus relevos, Wallinius y Bilyk. El incombustible Duvnjak llenó ese vacío.
El Barça salió con la directa metida. Con rápidas transiciones cobró sus primeras ventajas y las defendió con solvencia, lo que le permitió a su vez contraatacar. Los dos porteros, el checo Mrvack y Pérez de Vargas, evitaban, uno que el Barça se escapara mucho, y el otro que el Kiel se acercara. Los respectivos centrales protagonizaron los últimos minutos de la primera parte. Cindric encontró puerta y llevó la diferencia a esos cinco tantos. Zarabec, con tres goles, la redujo. El Kiel perdió la última posesión y Gonzalo marcó desde su área redondeando esta media hora con sus nueve paradas.
VUELCO CASI TOTAL
El Barça siguió bien apostado en la pista, aunque las rotaciones le hicieron perder algo de mordiente. No halló la conexión con Fàbregas en el pivote, muy bien marcado.
Mantenía un colchón de seguridad de tres goles hasta que el extremo Ekberg encadenó tres casi seguidos y provocó el primer empate (28-28) a falta de cuatro minutos. Dos paradas de Landin a Ariño y Aleix Gómez dieron a su equipo las ocasiones para ponerse por delante (30-28).
El Barça jugó ya contra el reloj y el Kiel perdió el balón a 17 segundos del final. Los azulgrana encontraron, por fin, a Fàbregas desmarcado, que logró el 30-30. Un partido puro de Champions entre sus dos heraldos más significados, y que calienta la visita del Kiel la próxima semana al Palau. ●