El vuelo de Lara Gut
Debutante en la Copa del Mundo en 2007, la suiza ha conquistado su segundo gran Globo de Cristal
La sonrisa de Lara Gut-Behrami (27-4-1991) ha dominado esta temporada la Copa del Mundo de esquí. La suiza ya tiene en su casa el segundo gran Globo de Cristal, el que suma al que conquistó hace ocho temporadas, en 2016. Habrá quien caiga en la tentación de vincular esta victoria con una campaña en la que las lesiones se han cebado con la competición alpina y han afectado a cuatro de las mujeres que podía cuestionar el dominio de la esquiadora de Sorengo. Pero esa tesis tiene una base endeble, porque Lara Gut ha esquiado a un nivel altísimo desde que empezó la temporada y ya antes de las lesiones de Petra Vlhova, Mikaela Shiffrin, Sofia Goggia y Corine Sutter había puesto las bases para ser la mejor de la temporada.
El vuelo de Lara Gut al cielo de la Copa del Mundo tiene detrás el mérito de quien es capaz de volver a ganar después de atravesar épocas de oscuridad en las que parecía que daba un paso al lado y que su carrera declinaba. Pero no. La Lara de 2024 es más potente que la de 2016 o de la que en 2014 se fue hasta las siete victorias. Su potente sonrisa, marca de la casa, ha dominado la competición para romper su techo de triunfos en una sola campaña (ocho) y llevarse a casa los globos de la General, el de Supergigante (quinto) y del Gigante.
‘SANGRE ESPAÑOLA’
Lara Gut nació en el cantón de Ticino, territorio suizo que se divide en dos el norte de la Lombardia italiana. Domina cuatro lenguas con naturalidad. Italiano y francés le vienen de cuna; el alemán, porque es la lengua del las grandes montañas suizas donde se forman las estrellas del esquí nacional; y el inglés, por la escuela.
Y hay una quinta lengua que ama y habla casi a la perfección: el castellano. Porque Lara Gut creció junto al equipo español, coincidió con Carolina Ruiz y en la estructura de su equipo tenía a un español como pilar de su trabajo: José Luis Alejo, que no seguirá a su lado en la 2024-25.
La primera noticia que tuvo la Copa del Mundo de Lara Gut fue el 28 de diciembre de 2007. Con 16 años, en Lienz, se lanzó en el Gigante. No lo acabó. Como tampoco sus tres siguientes salidas. Pero la primera vez que llegó a la línea de meta fue para acabar en el podio: tercera en el Descenso de St.Moritz, escolta de la gran Tina Maze y de la austriaca Maria Holaus. Era el 28 de febrero de 2008. Su colección de victorias se abrió en esa misma pista 10 meses después al ganar el Gigante por delante de Fabienne Sueter y de Nadia Fanchini.
El mundo del esquí comenzó a saber cosas desde entonces de la niña que hoy es la mujer que tiene en su casa el Globo de Cristal. Saber de su pasión por tener una scooter y hacerse famosa en su tierra porque cuando al fin la tuvo todo el mundo la reconocía por el verde llamativo de la moto y el rosa de su casco. De esa otra Lara Gut, la que no es una bala en la pista y un prodigio de elegancia, hay facetas igual de importantes. O más.
VIOLENCIA DE GÉNERO
Ganar el Globo ocho años después es algo increíble”
“Estoy muy orgullosa de lo logrado. ¡Y muy cansada!”
LARA GUT Ganadora de tres globos esta temporada
La gran campeona suiza no es ajena a un problema mundial, el del maltrato a las mujeres. Hace ahora 10 años, el 26 de marzo de 2014, Lara Gut fue invitada a participar en la sede de la ONU, en Ginebra, en unas jornadas tituladas Heridas a muerte. Fue una de las que leyó textos de mujeres víctimas de maltratos. Durante su lectura, Lara apenas pudo contener las lágrimas a causa del testimonio al que estaba dando voz.
“Si todavía suceden cosas como las que he tenido que leer, quiere decir que no se hablan bastante de ese tema. Es inadmisible que las mujeres sean asesinadas, maltratadas”, explica una Lara Gut implicadas en ayudas sociales como a los enfermos de SIDA o las campañas de Amnistía Internacional.
Campeona olímpica en Pekín 2022 y doble oro en los Mundiales de Cortina d’Ampezzo del año anterior, la vida de Lara dio un giro importante cundo su camino se cruzó con el del futbolista Valon Behrami, internacional suizo con sus orígenes en una familia albano-kosovar. El 12 de julio de 2018 se casaron y desde entonces su apellido aparece en la Copa del Mudo como Gut-Behrami. “Es lo mejor que me ha pasado en mi vida”, explica Valon. Camino de los 33 años, Lara tiene motivos para que su sonrisa sea más radiante que nunca. Porque es de nuevo la mejor esquiadora del mundo.