Sin réplica a Mbappé
EL BARÇA NO TIENE MÚSCULO ECONÓMICO PARA FIRMAR A UN CRACK SIMILAR • NO AGUANTA EL HABITUAL EQUILIBRIO EN EL MERCADO CON EL MADRID Y NO IGUALA, ESTA VEZ, EL FICHAJE DE UN ‘GALÁCTICO’
El Barcelona vive momentos convulsos. El rendimiento deportivo no es el esperado pese a la inversión y la incertidumbre es constante. A un cóctel difícil se suma el éxito del eterno rival. El Real Madrid, campeón de Laliga y la Supercopa, jugará la final de la Champions y, además, se refuerza con el soñado Mbappé para la 2425. El galo anunció el viernes que deja el PSG.
En los despachos del Camp Nou, históricamente, siempre han podido contrarrestar o superar los fichajes tan mediáticos y desequilibrantes. Actualmente, las arcas del club y la situación del mercado lo hacen improbable.
LOS CULÉS, TRANQUILOS
En el Barça no se han mostrado preocupados por Mbappé. “Jugar contra él sería genial. No hay miedo”, aseguró Lewandowski. El presidente Laporta auguró que dañaría la armonía: “Distorsionará el vestuario”.
Si repasamos las últimas diez temporadas, vemos como, de forma habitual, ningún gran fichaje queda sin respuesta por parte del eterno rival. En la 2013-14, el Madrid firmó a Bale, entonces el nombre más caro de la historia del club por 100 millones, y el Barça a Neymar. La operación, polémica, rondó los 90. En la 14-15, James llegó al Bernabéu y Luis Suárez, al Camp Nou: estrellas del Mundial de Brasil. En la 15-16 el dispendio bajó con traspasos como Danilo o Casemiro en el Madrid y Arda Turan en el Barça. La dinámica se mantuvo en la 16-17 (Morata, Umtiti o Alcácer). En la 17-18, el desembolso catalán fue mayor. Firmaron a Coutinho y Dembélé y los blancos, a Theo Hernández y Ceballos. En el 18-19, el Madrid elevó su apuesta con Vinicius o Courtois, más determinantes que los Malcom, Vidal, Arthur Melo o Lenglet. La igualdad volvió en la 19-20: Hazard, Mendy y Rodrygo, frente a De Jong y Griezmann.
LLEGAN LAS PALANCAS
Seguimos con la 20-21, sin excesivos reclamos (Hakimi, Odegaard, Pjanic, Trincao...), algo que se reeditó en la 21-22 (Camavinga, 31 millones, y Ferran Torres, 55). En la 22-23 aparecen las palancas culés, que cristalizaron en Lewandowski, Raphinha o Koundé. El Madrid fichó a Tchouaméni por 80 kilos.
En el verano previo a la 23-24, Florentino echó el resto por Bellingham (103 millones), una apuesta aprobada de forma clara, y Laporta se decantó por Vitor Roque (40), cuyo rendimiento no ha sido el esperado.