Un juego de niños para Inglaterra
APLASTA A IRÁN EN UNA EXHIBICIÓN DE SAKA (DOBLETE) Y BELLINGHAM (GOL) Los de Southgate arrancan asustando con un ‘set’ • Aparatoso choque que dejó K.O. al portero Beiranvand • Partidazo sin diana de Kane y dos tantos ‘estériles’ de Taremi
Inglaterra fue una tormenta en el desierto tan intensa que sepultó a Irán en su estreno en el Mundial. El descenso en la Nations y los seis partidos que encadenaban sin ganar los Three Lions se esfumaron con la facilidad que el viento mueve la arena.
Las dudas desaparecieron amontonando dianas sin descanso. Un juego de niños, con los wonderkids Bellingham y Saka desatados. Una goleada plácida para iniciar su aventura en Qatar. Otro triunfo por aplastamiento como en 2018 frente a Panamá (6-1). Empiezan asustando.
La tercera Copa del Mundo consecutiva iraní de Queiroz (récord) arrancó accidentada. Un choque aparatoso, nariz contra nariz, entre Hosseini y Beiranvand dejó K.O. al meta. Tan doloroso como la derrota sufrida.
Les cayó un chaparrón de goles mientras Maguire recuperaba su estatus. El criticadísimo defensa del United se reivindicó en el Khalifa Stadium. Southgate le tiene una fe ciega y el central fue un peligro, remate de cabeza al larguero incluido, antes de irse conmocionado.
Fue un gigante en unos Three Lions que rugieron y se comieron poco a poco a Irán. El embudo asiático lo sortearon por los costados. Kane, en modo asistente, se exhibió y dirigió una orquesta que toca su mejor partitura llegando desde atrás.
Bellingham, titular en su primer Mundial, tiró la puerta abajo de Inglaterra. Mojó por primera vez con su selección. Shaw la puso y Jude cabeceó a la red. Cada choque su precio sube 10 kilos.
El gol de Bellingham sacó todo el fútbol inglés como si giraran el bote de kétchup. Saka, después de una dejada de Maguire, se inventó un golazo con la zurda. Y Sterling, con el exterior, puso el 3-0 en 11 minutos. El extremo del Arsenal completó su doblete siendo el más joven (21 años y 77 días) en marcar dos goles en su estreno en un Mundial desde Beckenbauer en 1966 (20 y 304).
Taremi, con otro doblete —uno de ellos de penalti—, fue el único iraní que se rebeló a su destino. Rashford y Grealish cerraron un set que dispara el hype inglés. Las expectivas ya son infinitas. ⬤