Cuatro años y mucho trabajo...
Débil en las áreas, a Estados Unidos le queda mucho para poder soñar con algo grande en su Mundial, en 2026
No puede uno, en este caso Estados Unidos, plantarse en los octavos de fina de todo un Mundial con un rendimiento tan anticompetitivo donde se deciden los partidos: cerca de tu portería y de la contraria. Porque lo normal es que te ocurra lo que en el Khalifa Stadium, que te despachen con rapidez y facilidad.
Así lo hizo Países Bajos, que sin florituras le dio una lección de saber estar y una seria advertencia con vistas a cuatro años. Será entonces cuando USA sea la anfitriona de la Copa del Mundo, y le falta mucho trabajo a estas alturas para poder soñar con algo grande.
PELÉ, SIEMPRE PRESENTE
Fue la noticia impactante del día, publicada por ‘Folha de Sao Paulo’, y obviamente a Qatar también llegó con mucha repercusión. Después de que se informara en Brasil del empeoramiento del estado de salud de Pelé, el Khalifa Stadium presentó en su enorme Aspire Tower una imagen de O Rei acompañada del siguiente mensaje, en inglés: “Ponte bien pronto”.
‘BABY USA’
Estados Unidos llegó al torneo con la expectativa de quitarse de una vez por todas ese sambenito de que siempre le falta algo, a saber qué, para dar el paso definitivo. Y se va de Qatar con esa etiqueta todavía colgada. Irregular estas semanas, a ratos sorprendiendo positivamente y a ratos decepcionando. Una explicación, aunque desde luego no la única, podría estar en la edad.
Según los datos difundidos por el prestigioso CIES Football Observatory, la selección de Gregg Berhalter fue la que presentó durante la fase de grupos una menor media de edad (25,31 años) de entre aquellas que avanzaron a octavos. El vaso medio lleno, para quien elija creer: en 2026 talentos con proyección como los Yunus Musah (20), Gio Reina (20), Dest (22), Weah (22) o Pulisic (24) estarán más maduros y su Mundial podría ser su Mundial.
NOPPERT, EN LA SOMBRA
Aunque el dominio holandés y el resultado inviten a pensar lo contrario, hay que destacar a Andries Noppert, el héroe secundario de este cruce. Le paró un mano a mano en el 3’ a Pulisic que pudo cambiarlo todo, un chutazo en el 43’ a Weah o un remate en boca de gol a Tim Ream en el 49’.
HISTÓRICO MEMPHIS
Cody Gakpo se está llevando merecidamente la mayoría de elogios holandeses desde noviembre, pero este sábado perdió algo de foco y lo ganó su socio en la delantera, Memphis Depay. El futbolista del Barcelona, a quien se acusó de reservarse en el Camp Nou para rendir a su máximo en Qatar, tiró del carro y pronto firmó el 1-0, definiendo con precisión en el área.
La recompensa para el díscolo atacante fue por partida doble, la del valor en el marcador y la del valor simbólico, puesto que le servía para adelantar a Huntelaar y, con 43 tantos, convertirse en el segundo pichichi de siempre de su país. Ya le supera únicamente un tal Robin van Persie, con 50 dianas.
Memphis, con el picorcito, intentará recortar esa distancia en esta Copa del Mundo, aunque tuvo incluso opciones de lograrlo ayer en otras dos ocasiones. Cuando le cambiaron, su persiana llevaba bajada un rato.
DUMFRIES SE LO CREYÓ
El carrilero jugó con ganas de mambo, creyéndose muchísimo eso de que “la mejor defensa es un buen ataque”. Con vuelo y precisión, los estadounidenses no le vieron llegar nunca. Por eso asistió con dos pases calcados con la derecha para el 1-0 y, letal al borde del descanso, el 2-0. En la segunda mitad, cuando USA trataba de crecerse, los hundió de nuevo, esta vez marcando y con la zurda. ¡Chapeau!