VER PARA CREER

Hay que verlo parar creerlo.

Siendo muy superiores, hay que ver el partido con tus propios ojos para cerciorarse de lo que ha pasado.

Hemos vuelto a cometer los mismos errores que en la segunda parte contra Japón.

Marruecos es un equipo que sabíamos que iba a ser un rival muy incómodo, que a Croacia le jugó exactamente igual que hizo contra nosotros. Hemos tenido el control del juego pero

nos ha faltado hacer más desmarques de ruptura, finalizar las ocasiones que hemos tenido,

sobre todo en el primer tiempo cuando le buscábamos la espalda a los centrales, como la que ha tenido Asensio. Nos ha faltado jugar más por banda y ser más verticales y buscar profundidad.

Marruecos es un equipo mentalmente muy duro y muy fuerte colectivamente,

el cual ha sabido cerrarnos las líneas de pase. Es una lástima, porque hemos vuelto a caer en los mismos errores, deberíamos haberle dado más velocidad al juego, sobre todo cuando tienes a un equipo enfrente que está defendiendo en bloque bajo, con un repliegue superintensivo, y nosotros nos estábamos centrando en entrar por el centro. Y ellos nos han tapado muy bien los espacios y así hemos generado pocas ocasiones de gol.

En el segundo tiempo, nosotros

éramos físicamente superiores, pero a medida que iban pasando los minutos ellos iban creciendo anímicamente,

por lo que les ha salido su plan a la perfección.

En el fútbol hay dos conceptos de juego, que son el defensivo y el ofensivo. O estás atacando o estás defendiendo, y ellos el aspecto defensivo lo han ejecutado a la perfección, ya que

nos han sabido neutralizar, cerrar los espacios y no hemos sabido generar alternativas.

Y así nos ha pasado, que al final la tanda de penaltis es una lotería. En este tipo de situaciones, el equipo que tiene menos que perder, como puede ser Marruecos, está mucho más libre de presión, y en cambio nosotros sí la hemos sentido por ser los favoritos en este encuentro y nos ha costado la eliminación.

Ahora, debemos tener calma, reflexionar, y sacar conclusiones de cara al futuro, porque

tenemos una selección con mucha materia prima, muy buenos futbolistas,

un equipo muy joven y muchos de nuestros chicos volverán a vivir todas estas situaciones que hemos tenido, y junto a nuestra selección sub 21 podemos decir que tenemos el futuro inmediato cubierto.