Djokovic juega en Turín pero mira a Australia

QUIERE RECUPERAR EL NÚMERO 1 Nole llega por séptima vez invicto a semifinales tras ganar a Medvedev • Opta al mayor premio de la historia

Enviado especial

Uno de los récords del que Novak Djokovic está más orgulloso es el de semanas como número uno mundial con un total de 373. El serbio perdió el liderato mundial este año por culpa de sus ausencias en el circuito como consecuencia de su negativa a la vacuna contra el coronavirus. A pesar de ello, y gracias a una secuencia de 23 victorias en los últimos 24 partidos, Djokovic puede aspirar a recuperar el cetro ATP en la gira por las antípodas del mes de enero.

Nole, sabedor de ello, se dejó la piel para ganar ayer un intrascendente tercer partido de la fase de grupos de la Copa Masters de Turín ante Daniil Medvedev por 6-3, 6-7(5) y 7-6(2). Tuvo una pájara al final del segundo set y la batalla se alargó durante 3 horas y 11 minutos. Prevaleció el campeón de 21 grandes, que levita por las pistas desde que sabe que podrá jugar el Open de Australia 2023. “Fue un alivio saber que puedo hacer una pretemporada con un objetivo claro”, comenta.

Si se corona por sexta vez como maestro este domingo, tendrá opciones matemáticas de acabar el primer Grand Slam del curso por delante de los demás. Djokovic es hoy el gran rival de Carlos Alcaraz en el ranking. El balcánico, además de los 600 puntos netos con los que se presenta en la penúltima ronda, sigue optando al mayor talón de la historia del deporte de la raqueta que asciende a 4.813.064 euros.

De momento, ha recaudado 1.419. 378 euros. Djokovic llegó a sentirse bastante mal físicamente en el duelo con Medvedev hasta el punto de temblarle las manos. Desde su banquillo le dieron un batido. “No me planteé la retirada porque no sabía si eso me iba a permitir jugar después la semifinal”, confesaba a la conclusión.

Novak, después de dominar a sus anchas la manga inicial, se enredó en una especie de pájara que recordó a la semifinal y final de París-Bercy con Stefanos Tsitsipas y Holger Rune, respectivamente. Fue haciendo la goma hasta que volvió a perder su saque en un eterno décimo juego del tercer set.

CAÍDA LIBRE DEL RUSO

Medvedev, en una muestra más de su falta de confianza, entregó su servicio cuando estaba a cuatro puntos de la victoria del honor. También había sacado para ganar en el partido anterior con Tsitsipas. El desenlace murió en el tie break.

El buen momento de tenis por el que atraviesa Djokovic contrasta con la crisis de Daniil. El punto de inflexión fue la final perdida del Open de Australia con Rafael Nadal. Ha caído derrotado en sus últimos ocho duelos con tenistas del top10. El serbio