Lección de costura
JOSEP FONT TOMA LAS RIENDAS DE DELPOZO CON EL COMETIDO DE REJUVENECER LA MARCA RESPETANDO EL INMENSO LEGADO DEL DISEÑADOR FALLECIDO.
Estoy muy motivado, pero tranquilo. Aquí es donde quiero estar», declaraba Josep Font poco antes de su primer desfile para Delpozo. La cita fue a finales de agosto, en el parque El Capricho de Madrid. Las modelos desfilaron en círculo alrededor de una fuente, rodeadas por la naturaleza del jardín del Romanticismo y envueltas por los acordes de The Chinese Birdwatchers, que tocaron en directo a su paso. La fluidez de las gasas y tules de seda se encontraba con los pliegues y fruncidos que esculpían organzas, linos y crepés en tonos neutros y delicados salpicados por colores intensos como el coral o el azul. «Hemos introducido una gran variedad de técnicas artesanales para ensalzar la costura clásica. Las piezas han sido modeladas, una a una, desde el interior, para conseguir siluetas nuevas. Otra de las características de esta colección han sido los sugerentes detalles, logrados a través de estampados y bordados», comentaba el diseñador sobre la colección. De este modo, cuidando a mano cada pieza, Josep Font se encontraba con su predecesor, Jesús del Pozo, fallecido hace poco más de un año, dejando la firma en sus manos tras la adquisición de la compañía por parte de la empresa Perfumes y Diseños, que se encarga de la comercialización de sus fragancias desde 1992. «Me siento muy cercano a Jesús y a sus valores, aunque no nos conocimos personalmente. Ambos defendemos un trabajo artesanal, muy arraigado a la costura clásica, y nuestra visión de la mujer es muy parecida.» Sin embargo, Font es consciente de que forma parte de una ambiciosa estrategia empresarial. Su cometido es renovar la marca, «crear una imagen más fresca, joven e internacional manteniendo la esencia de la casa» para ampliar la clientela de la firma y conquistar el mercado internacional. Esto es, precisamente, lo que le atrajo del proyecto y lo que le convenció para aceptarlo, una periodo que afronta con «mucha emoción, pero también mucho respeto, sintiendo la responsabilidad que supone iniciar una nueva etapa». Afortunadamente, cuenta para ello con el equipo de Delpozo: «Tan solo he incorporado a una persona de mi absoluta confianza, el resto es el equipo que trabajaba con Jesús».