EL CINE DEL MES
llevar la suya al trabajo. Su hija recién nacida dormía en el plató para darle el pecho y se negó a que no hubiera jornada de descanso en el rodaje. "Todos necesitamos un día en casa con nuestra familia". Se plantó hasta que el domingo quedó despejado.
La contención y los gestos rasurados grabaron su nombre en un Globo de Oro. Asegura que solo se parece a la reina en que las dos son "duras de roer". De niña le detectaron un tumor en un ojo y artritis juvenil. A la reina la endureció liderar un país en plena posguerra. Antes de rodar la segunda temporada ya sabía que sería su última. Los años corren por los episodios y la piel de Isabel II se seca, pero la de Foy es treintañera. Tras la crisis del canal de Suéz, una visita de los Kennedy y el terremoto sentimental de la princesa Margarita, Olivia Colman la sucederá en el trono.
Matrimonio y tatuajes
Foy se desenvuelve a gusto en el pasado. Con Andrew Garfield estrena Una razón para vivir, el biopic de un joven al que la polio dejó paralítico y, gracias a su mujer, diseñó una silla de ruedas con respirador artificial. La dirige el actor Andy Serkis. A ella le enorgullece cómo el film refleja el sacrificio, la esencia del amor real. Casi se enfada cuando le comentan que sus protagonistas son mujeres fuertes. "¿Qué otra opción hay?". El año que viene repite como consorte y estrella. Junto a Ryan Gosling y bajo la claqueta de Damien Chazelle, director de La La Land, coprotagonizará First Man, la vida en celuloide de Neil Armstrong. Más tarde, en La chica en la tela de araña encarnará a Lisbeth Salander, la hacker sueca de la saga Millennium. Por compensar. Un poco de azúcar, un poco de punk.