HECHAS UN CROMO

SUS HIJAS NO ENCONTRABAN LOS CROMOS DE SUS FUTBOLISTAS PREFERIDAS. EN MONTIJO (BADAJOZ), UNA MADRE HA CONFECCIONADO LA COLECCIÓN.

Las hijas de María Vázquez solían ir a ver los partidos de las chicas de la escuela de fútbol local. Con ellas comenzó la afición. De la primera división, la pequeña, de cinco años, prefería al Sevilla. La mayor, de ocho, se quedaba con el Barça. El chasco era que no podían terminar de llevarse el hobby a casa. Las niñas coleccionaban cromos, pero les faltaban los de sus deportistas favoritas. No es que a los quioscos de Montijo, al este de Badajoz, no hubieran llegado. Es que no existían. Su madre se encargó de remediarlo. Con Photoshop, las imágenes disponibles en las webs de los equipos y los cromos de La Liga –masculinos– como plantilla, confeccionó las láminas iniciales. Los primeros cromos fueron sevillistas. Pero incluso de las hispalenses fal-

CON PHOTOSHOP Y LAS IMÁGENES DISPONIBLES EN LA WEB, COMPUSO LAS LÁMINAS INICIALES

taban algunas fotos. Luego comenzó a montar los de las jugadoras del Barcelona, pero se acabó enredando. Cuando a principios de abril pidió ayuda en Twitter, María había confeccionado 250 cromos. Apenas le quedaban cinco equipos para cerrar la colección. Lo complicado era dar con las fotos oficiales de las chicas. De las otras, las que aparecen en el campo, algunos fotógrafos amigos la abastecían. En unos días, su mensaje logró más de 9.000 retuits. Los clubes se ofrecían a proporcionarle todo lo que necesitara. Tras el episodio de viralidad, Iberdrola, patrocinador de la liga femenina, llevó a la familia al partido entre el Barcelona y el Sevilla. En cuanto a los cromos, todas las fotos están ya en el ordenador de María. Solo quedan dos equipos por montar.

Las La fotos que más costó co conseguir fu fueron los posados of oficiales, a menudo en baja resolución en las webs de los clubes. cl

María Vázquez y sus hijas, de 8 y 5 años, repasan la colección de cromos.