DAR LA CARA
CUANDO OCULTAR EL ROSTRO ES UNA OBLIGACIÓN, DAR LA CARA POR UNA CAUSA COBRA UN NUEVO SENTIDO.
La lucha feminista de las mujeres en Argelia es imparable.
El 8 de marzo, millones de personas de todo el globo salieron a la calle para marchar en honor a las mujeres. En Argelia, las manifestaciones comenzaron semanas antes y ellas también fueron las protagonistas absolutas. Las argelinas han liderado las movilizaciones y protestas, políticas y sociales, que reclaman un futuro más justo e igualitario para su país.
DEROGAR UNA LEY NO ESCRITA
No existe en Argelia una ley que obligue a llevar hijab. Pero la norma social oculta a miles de mujeres tras un velo. Por eso, las jóvenes han llenado las redes sociales con el hashtag árabe #PrisioneraDelHijabEnArgelia para contrarrestar la imposición de una vida tras un trozo de tela. Y por eso, el hecho de que Melissa Ziad, de 17 años, bailara frente a la bandera nacional con la cara descubierta, se convirtió en un gesto de valor. El país tampoco cuenta con una legislación que prohíba a un presidente encadenar cinco legislaturas, pero, ante la presión, Abdelazziz Bouteflika ha renunciado a las elecciones, ahora pospuestas. Y ha sido gracias a las protestas guiadas por mujeres como Djamila Bouhired, de 83 años, heroína nacional e icono para quienes, como ella, quieren dar la cara, en todos los sentidos posibles.