EMPODERAMIENTO
¿Cuáles han sido las iniciativas de Takeda en la lucha contra esta pandemia?
Takeda inició la investigación con una globulina hiperinmune para la Covid-19 y poco después impulsó la CoVIg-19 Plasma Alliance, una asociación formada por compañías de plasma líderes para enfrentar este desafío. En lugar de investigar de forma individual, decidimos trabajar unidos, porque juntos somos más rápidos y podemos llegar más lejos para conseguir salvar las vidas de las personas impactadas por esta pandemia. Con este objetivo, estamos desarrollando una terapia derivada de plasma sin marca, llamada globulina hiperinmune (H-Ig), que contiene niveles constantemente altos de anticuerpos contra el nuevo coronavirus. Nuestra H-Ig podría ser una de las opciones de tratamiento más tempranas para las personas en riesgo de complicaciones graves.
¿Qué cambios estructurales cree que necesitan las compañías para adaptarse a la nueva normalidad?
Infraestructura tecnológica y formación de la plantilla, comunicación continua y transparente para construir equipo y una cultura de flexibilidad, diversidad e igualdad. Un equilibrio entre trabajo presencial y teletrabajo es una buena opción que tiene en cuenta las necesidades operativas del negocio y las personales de los empleados.
¿Cómo se sigue fomentando el talento, especialmente el femenino, en esta situación?
En Takeda el 58,8 % de los empleados son mujeres, y son mujeres el 56 % de los directivos, así que nos tomamos en serio la igualdad. Tanto la planta de producción de terapias celulares de Tres Cantos como el equipo de investigación de Takeda Iberia están liderados por mujeres. La igualdad de oportunidades se consigue, por ejemplo, logrando que la maternidad no se convierta en un freno para el desarrollo profesional e impulsando medidas de conciliación. ¿Cómo se mantiene el liderazgo en esta situación? La capacidad de liderazgo es independiente de las circunstancias externas, está ligada a la persona que lo ejerce. Pero para potenciar el verdadero liderazgo sí es necesario desde la compañía fomentar una cultura de empoderamiento del empleado, que cobra especial relevancia en situaciones de crisis. Mi aprendizaje es que como directiva y como compañía del sector tenemos que poner en valor nuestro esfuerzo investigador, productivo y colaborativo.
n