ECOCASA PARA LLEVAR
Este huevo futurista es una microcasa sostenible. Las fabrica en Bratislava (Eslovaquia) la empresa EcoCapsule; se compran por Internet y se envían a ocho ciudades de todo el globo, entre ellas, Madrid. Su creador, el arquitecto Tomas Zacek, las concibió hace más de un lustro como un camino hacia la habitabilidad autónoma. Hoy, son una promesa de aislamiento placentero y sostenible.
Los confinamientos, los precios al alza de la vida urbana y la extinción progresiva de los empleos presenciales animan a abrazar el nomadismo sin más ataduras que el teletrabajo. En la capital de Eslovaquia, los arquitectos e ingenieros de EcoCapsule alimentan estas fantasías errantes con sus viviendas en miniatura y autosuficientes. ¿Quién no querría, dado el panorama, tener una casita portátil, todoterreno y ecológica?
'WANDERLUST' Y SOSTENIBILIDAD
Cuando Zacek fundó EcoCapsule en 2014 pensaba en un público concreto: científicos, documentalistas y demás profesionales que pasan largas temporadas en naturalezas remotas añorando una ducha de agua caliente o una nevera bien surtida. Sin embargo, el wanderlust (el deseo ferviente de viajar) y la sostenibilidad pronto revelaron todo el atractivo de las 'ecocápsulas'. Ahora, sus clientes son viajeros empedernidos y hosteleros que adquieren las cápsulas en lote para armar eco resorts. La premisa de las cápsulas es precisamente esa: ofrecen la comodidad de una habitación de hotel sin perjudicar al planeta. Para ello, están equipadas con placas solares y un molino de viento de 4,5 metros de altura que generan electricidad limpia. Con ella se recarga una batería que dura 4 días a pleno rendimiento y soporta temperaturas de entre -15ºC y 40ºC.
El abastecimiento de agua se hace mediante un tanque que recoge la lluvia y la potabiliza. A falta de precipitaciones, se puede rellenar desde un lago o un río. El diseño ovalado, además de facilitar esta recogida, regula la temperatura. La ventilación se puede hacer de manera natural a través de su gran ventana o mediante una bomba de aire frío y caliente, cuya instalación es opcional.
En la aldea suiza de Guttannen la ecocápsula es, más que ocio, una promesa de regeneración. Ante el éxodo rural, el ayuntamiento adquirió en 2020 una de estas microviviendas para atraer a familias jóvenes, potenciales nuevos vecinos. El precio de su alquiler por noche es de 150 euros e incluye comida o compras en alguno de los comercios locales ( ig-ecocapsule.ch).