El jardín de Marta
LAS DALIAS SON PARA EL VERANO
Esta flor, originaria de México, lleva en Europa más de 200 años.
En 1789 llegaron las primeras semillas al Real Jardín Botánico de Madrid y, desde allí, se enviaron a jardines de todo el continente. Agradecidas y fáciles de cultivar, son perfectas para esta época. Cultivarlas Las dalias necesitan como mínimo 8 horas diarias de pleno sol, aunque prefieren la sombra por la tarde si las temperaturas son especialmente altas. Son sensibles al frío y no deben plantarse hasta que el suelo se haya calentado por encima de los 16ºC y haya pasado el peligro de heladas. Es preferible preparar bien el suelo, asegurarse de que drene y echar de 5 cm a 10 cm de compost estiércol. Para plantar los tubérculos, haz un agujero a unos 10 cm de profundidad y colócalos en horizontal, con la yema de crecimiento hacia arriba. Deja al menos 30 cm entre cada planta.
Cuidarlas El riego debe ser consistente en primavera y verano, y no deben regarse hasta que salgan los primeros brotes a través de la tierra.
Cortarlas Las dalias florecen desde verano hasta entrado el otoño. Cortadas, duran de 5 a 7 días si se hace en el momento correcto, que suele ser a primera hora de la mañana o a última de la tarde. La incisión debe ser inclinada y, antes de hacerla, hay que comprobar la parte de atrás de la cabeza de la flor y buscar pétalos firmes y frescos.