AMOR, SEDAS, BOMBAS
EN ' A LA CAZA DEL AMOR' (MOVISTAR +), LILY JAMES LE SACA BRILLO AL PERÍODO DE ENTREGUERRAS CON LA ÚLTIMA ADAPTACIÓN DE LA NOVELA DE NANCY MITFORD.
Hay un caballo en el salón. Olisquea tras el sillón de lord Alconleigh mientras un chispazo de la cámara fotográfica llena la habitación de humo. Lord Merlin pide tranquilidad. El animal no va a hacer demasiado daño a nadie. Está semidomesticado. Como lord Alconleigh.
El padre de los Radlett a veces los convierte en presas de sus cacerías. Con sus perros juega a atraparlos por la campiña. La mayor, Louisa, está a punto de contraer matrimonio, pero Linda, lo sabe, es la belleza familiar. Ella también quiere casarse. Se niega a quedarse para siempre en la casa de Alconleigh. Su prima Fanny es consciente. La ve mirar a los hombres cuando pasa las vacaciones con ella. Ni en la bañera se separan. Hasta que, en su puesta de largo, Linda conoce a un amigo de lord Merlin. Ahora lleva un anillo de compromiso en la mano. Por primera vez. La segunda de los Radlett comienza, entonces, a trenzar matrimonios, embarazos y divorcios por Europa. Fanny la observa y la escribe.
En A la caza del amor (Movistar +), Lily James viaja y Emily Beecham anota. Con Andrew Scott o Dominic West, las británicas adaptan al fotograma la novela homónima de Nancy Mitford. De su padre y de su infancia tomó la escritora el esqueleto de la historia, encapada por secuelas. Con la miniserie, sus palabras se ponen frente a la cámara por tercera vez. En esta ocasión, la actriz Emily Mortimer dirige la adaptación. The Guardian ya le ha puesto nota. "Absolutamente gloriosa". ■