Déjate de sutilezas. Es hora de perder el miedo al eyeliner y trazarlo con toda la intención. Los diseños pulidos de Erdem –elaborados con delineador líquido de alta precisión–, conviven con sus opuestos, más difuminados en Courrèges –se consiguen con mina blanda–. Pero si en algo coinciden ambas propuestas es en prolongar el trazo por el párpado inferior.