LAIA GARCÍA, 36
El origen de la hiperpigmentación puede tener varias causas y entre ellas están los cambios hormonales. Hace siete años Laia sufrió un cambio importante y fue entonces cuando empezó a tener manchas en la frente y en el labio. Al principio, probó de todo hasta que su dermatóloga le dijo que era un melasma y que jamás se iría. “Las manchas me hacían sentir mayor y apagada. Cuando se concentraron en la frente, empecé a llevar flequillo, gorros y accesorios que las ocultaran”, explica Laia. "Este tratamiento está, por fin, funcionando, y noto las manchas más atenuadas", añade. Asegura que si consigue mantenerlas a raya, se quitará el flequillo, empezará a lucir sus pecas y por fin podrá volver a ser ella misma.