La dieta de las emociones
Imagina tu vida dando el 100% de lo que puedes ofrecer, con energía y sintiéndote perfectamente, feliz, y lograr tus objetivos sin dejar de disfrutar de lo que te gusta. No es una utopía. Es la dieta de las emociones. Neus Elcacho, dietista integrativa y coach nutricional, parte de una premisa básica: disfrutar de una buena salud y disfrutar de la vida no son incompatibles. Todo lo contrario: una dieta consciente, sana, inteligente, flexible y digestiva nos ayuda enormemente a alcanzar la felicidad.
GUÍA PARA EL BIENESTAR
Su dieta de las emociones no es un régimen para perder peso, sino una guía para alcanzar el bienestar a través de pautas muy sencillas, pero que podemos aplicar cotidianamente. Buscar alimentos de proximidad o kilómetro cero; comer alimentos de temporada, comprar alimentos ecológicos ( sin arruinarnos por ello), aprender a leer correctamente la etiqueta de cada producto, saber qué alimentos nos conviene tener siempre lejos… Esta es la base, pero hay mucho más.
Es importante saber escuchar nuestro cuerpo, conocer cómo funciona la digestión y saber cómo alimentarnos diariamente cuando comemos fuera. También conviene saber qué debemos comer para tener más energía y concentración durante el día y lo que nos viene bien comer para relajarnos y dormir mejor durante la noche; qué comer entre horas, como dejar de comer por ansiedad, o cómo adquirir hábitos que nos hagan más felices.
Este es un libro lleno de consejos prác cos (y de ejercicios) que nos ayudarán en el día a día y paso a paso, para aprender a alcanzar el bienestar a través de la alimentación.
ALIMENTOS: ¿FELICES E INFELICES?
Neus Elcacho nos ayuda a comprender de manera profunda cómo comemos, o por qué priorizamos, por ejemplo, los alimentos con azúcares, sal y grasa, por qué nos movemos menos que los koalas, qué repercusiones tiene hacerlo o cómo nos influye esto en nuestro modo de pensar, de actuar y de vivir. Nos enseñará también que esta relación es bidireccional, es decir, que no solo comemos ciertos alimentos por cómo nos sentimos, sino que comer de una forma determinada nos hará sentir de una manera o de otra.
Para hacerlo, tendremos que entender que no solamente comiendo más de una clase de alimentos nos sentiremos mejor; esta es solo una pieza del puzle de nuestro estado emocional.
No sirve de nada si no cambiamos también algunos hábitos mentales y físicos. Cuanto más nos paremos a pensar en lo que estamos haciendo con nuestra vida y más busquemos en nuestro interior, más fácil será hacer cambios y más rápido notaremos estas modificaciones en nosotros
¿Qué relación tiene lo que comemos con nuestra felicidad? ¿Cómo escuchar a nuestro cuerpo para aprender a comer mejor y alcanzar el equilibrio? ¿Cómo dejar de comer por ansiedad? Comer de forma saludable y disfrutar de la vida son cosas perfectamente compatibles. TODO LO QUE HAGAS, SIENTAS Y COMAS A LO LARGO DEL DÍA, de tu semana, de tu tiempo, te aleja o te acerca a la felicidad.
y a nuestro alrededor. Un cambio que al final también se reflejará en nuestra forma de comer, ya que aprenderemos a alimentarnos y a disfrutar con ello.
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Por ello, Neus Elcacho nos recuerda que todo lo que hagamos, pensemos y comamos a lo largo del día, de nuestra semana, de nuestro tiempo, nos aleja o nos acerca a la felicidad: los hábitos alimentarios y el ejercicio; el bienestar emocional y el nivel de estrés; el grado de socialización, el contacto con nuestros seres queridos y el equilibrio con el entorno y la sociedad; el grado de realización diaria y de bienestar en nuestro trabajo o en las tareas cotidianas y, finalmente, el contacto con la Naturaleza y el sol. Ser felices está en nuestra mano.