PARACELSO
Paracelso (1493-1541) sería conocido en su época por la creencia de haber conseguido transmutar el plomo en oro, además de haberle dado su nombre al elemento zinc (zincum). Su nombre original no es Paracelso, esta denominación se la impuso él a sí mismo y viene a significar “semejante a Celso” haciendo referencia a Aulo Cornelio Celso, un enciclopedista y médico romano que habría vivo en torno al siglo I.
De Paracelso se sabe que trabajó como cirujano militar sobre el año 1522. Estudió en universidades como Basilea y Viena. A pesar de haber ejercido labores de cirujano no estaba de acuerdo con esta práctica que consideraba de barberos.
Se volcó en sus investigaciones en la mineralogía, y en la alquimia. Utilizó minerales para producir medicamentos y luchar contra las enfermedades. Además, contribuyó aportaciones de características de algunas enfermedades como la sífilis, que combatió con azufre y mercurio. La astrología influyó en gran manera en su concepción del hombre como microcosmos. Además, la alquimia jugaría un gran papel en su interpretación de los cuatro elementos, a los que asignó pertenencia a criaturas anteriores al mundo: el fuego pertenecía a las salamandras, el agua a las nereidas, la tierra a los gnomos y el aire a los silfos.