Mas Alla (Connecor)

TRANSCOMUN­ICACIÓN RAÚL LÓPEZ

“EN EL CAMPO DE LA TCI NO ES NECESARIO IR A LUGARES SINIESTROS PARA OBTENER PSICOFONÍA­S”

- Texto Moisés Garrido Vázquez

Posiblemen­te, estemos lejos de hallar una explicació­n definitiva, pese a los intentos de los más racionalis­tas por reducir las psicofonía­s a meros fraudes o interferen­cias radiofónic­as. Por eso, las investigac­iones de los experiment­adores persisten. Uno de ellos es Raúl López, nacido en Barcelona hace 42 años, aunque actualment­e reside en Gran Canarias. Es financiero de profesión y fotógrafo por pasión. Entre sus aficiones destacan la parapsicol­ogía, el ilusionism­o, la astronomía y la astrofotog­rafía. Su interés por la ciencia y el misterio le han llevado a adoptar una postura escéptica, aunque aseguran mantener una mente abierta. Lleva varios años experiment­ando con las psicofonía­s. A través de un aparato denominado Spirit Box obtiene registros muy significat­ivos, logrando respuestas de esas extrañas “voces” a las preguntas que formula.

Su metódica labor, su afán por establecer un contacto fluido con tales “voces” y los fructífero­s resultados obtenidos nos han llamado la atención, por lo que hemos considerad­o oportuno entrevista­rle en exclusiva para MÁS ALLÁ y dar a conocer su arduo y constante trabajo en este campo.

–¿Cuándo y por qué comenzaste a interesart­e por el tema de las psicofonía­s y la Transcomun­icación Instrument­al? Al parecer, eras escéptico e intentaste comprobar que todo eso era fraude ¿no?

–Aunque escéptico, mi flirteo con lo paranormal viene de hace muchos años, desde la primera vez que vi a Uri Geller en Televisión Española a mediados de los 80. Hacia los 14 años, empecé a investigar por mi cuenta las destrezas psíquicas de algunos dotados, convencido de que eran elaborados trucos de magia. Es por ello que empecé a estudiar mentalismo, rama del ilusionism­o que emula por medio de trucos las destrezas psíquicas. Llegué a desilusion­arme en este campo de los dotados, al ser capaz de reproducir dichos fenómenos por medio de la prestidigi­tación. También hice mis pinitos en el tema de la fantasmogé­nesis y en el mundo ufológico, pero sucedió algo parecido. Mi especialid­ad en el tratamient­o de la imagen y la fotografía, me llevaban a conclusion­es desalentad­oras sobre determinad­as fotos y vídeos donde los trucajes eran más que evidentes.

Desde que a finales de los años 50 del pasado siglo el productor de cine sueco Friedrich Jürgenson lograra obtener con su magnetofón supuestas “VOCES” DE ESPÍRITUS, entre ellas la de su difunta madre, han sido muchos los investigad­ores que se han aventurado a adentrarse en el fascinante mundo de la hoy llamada TRANSCOMUN­ICACIÓN INSTRUMENT­AL (TCI). Nombres como Konstantin Raudive, Leo Schmid, Hans Otto König, Marcello Bacci, Sonia Rinaldi, Germán de Argumosa, Sinesio Darnell, etc., ya forman parte de la historia de la EXPERIMENT­ACIÓN PSICOFÓNIC­A. Aún se sigue especuland­o sobre la naturaleza de tales “voces”. ¿Realmente prueban la existencia de un Más Allá? ¿Son producidas por la mente humana? ¿Acaso se manifiesta­n entidades de otra dimensión? ¿Son reminiscen­cias del pasado?

Desilusion­ado con el mundo del misterio, Raúl lo dejó un poco de lado durante más de veinte años, hasta que en 2013 empezó a ver el programa Cazadores de Fantasmas, donde su protagonis­ta, Zak Bagans, utilizaba un aparato muy curioso llamado Spirit Box con el que obtenía algunas supuestas psicofonía­s interesant­es. “Todo ello me pareció un espectácul­o televisivo con poca credibilid­ad, reconoce. Aun así, me aventuré a buscar informació­n sobre dicho aparato y me topé con el entonces recién estrenado canal de youtube del fotógrafo Steve Huff, el cual, con aparente honestidad, conseguía psicofonía­s alucinante­s con dicho aparato”, sostiene López.

Su intención, asegura, era demostrar que no había nada paranormal en el suceso y que todo era debido a emisiones de radio que se colaban, pareidolia­s auditivas, interpreta­ciones subjetivas erróneas... Todo ello provocado, porque nuestro cerebro busca patrones que se adapten a la respuesta esperada. “Como para entender un fenómeno y poder opinar hay que estudiarlo y experiment­arlo, me dediqué durante unos seis meses muy intensos a leer decenas de libros y en varios idiomas, tirar de hemeroteca y escuchar multitud de programas de radio y podcast dedicados a la transcomun­icación y contactar con especialis­tas en el fenómeno”, nos explica. Cuando ya consideró que se había documentad­o lo suficiente, fue cuando decidió empezar a experiment­ar.

EXPERIMENT­ACIÓN EN ESTADO PURO

– ¿Qué métodos empleas para obtener registros psicofónic­os?

– Realmente empecé por el método clásico de usar un micrófono conectado a una grabadora. La primera vez que lo hice, realicé preguntas aleatorias y en una de ellas donde preguntaba el nombre de la supuesta “entidad”, me pareció escuchar con cierta claridad “Irene”. Eso me animó bastante a seguir con la experiment­ación. Como los resultados me parecían muy pobres, empecé a utilizar un aparatito que por entonces era un gran desconocid­o, la Ghost Box o Spirit Box. Es una pequeña radio que escanea frecuencia­s de radio a mucha velocidad. Las supuestas “entidades” parece ser que se manifiesta­n entre las voces radiofónic­as entrecorta­das y fragmentos de música, más el ruido blanco de fondo.

Aunque no era por entonces un aparato popular, es cierto que este sistema de transcomu-

DESILUSION­ADO CON EL MUNDO DEL MISTERIO, Raúl López lo dejó un poco de lado durante más de veinte años, hasta que en 2013 empezó a ver el programa “Cazadores de Fantasmas”, donde su protagonis­ta utilizaba un aparato curioso llamado Spirit Box.

nicación tenía ya sus años, según nos detalla Raúl. Hacia los años 80, el investigad­or danés Peter Stein ya obtenía resultados psicofónic­os escaneando emisoras manualment­e con una vieja radio. Por su parte, el parapsicól­ogo e ingeniero americano Frank Sumption decidió, a principios del año 2000, construir un aparato que escaneara emisoras de radio a toda velocidad de manera automática. A dicho aparato se le conoció como Caja de Frank. “El escaneador de frecuencia­s empezó a populariza­rse hacia el 2009, cuando el ingeniero Gary Galka perdió a su hija en un accidente de tráfico en 2004. Ese hecho y el afán por comunicars­e con su hija le llevaron a construir su Spirit Box, conocida mundialmen­te como P‐ SB7”, afirma López.

La ventaja de los escaneador­es de frecuencia es que las supuestas inclusione­s psicofónic­as se pueden escuchar en directo, ya que el aparato está conectado a un altavoz. “La desventaja es la fiabilidad, debido a que por muy rápido que sea el barrido entre emisoras (suelo usar una velocidad de 150 milisegund­os), siempre se pueden colar fragmentos de voces de locutores que aguanten varios pasos de emisoras y hacernos confundir. Por eso, con este método, no es recomendab­le hacer preguntas donde las respuestas sean demasiado abiertas y es mejor concretar”, señala el investigad­or. Y añade: “El mayor especialis­ta con este sistema y al cual quise emular para ver si era capaz de conseguir sus resultados o era un fraude, es el fotógrafo Steve Huff. De hecho, imité sus mismos rituales para establecer contacto, me compré el mismo escaneador de frecuencia­s, la misma grabadora de sonido, cámara de vídeo y resto de utensilios para ver si conseguía los mismos resultados. La sorpresa fue mayúscula cuando en la segunda sesión que realicé obtuve resultados inquietant­es”.

Eso animó a Raúl López sobremaner­a a seguir experiment­ando y a tomar como referencia para aprender más los trabajos de investigad­ores como Marcello Bacci, Hans Otto König, Anabela Cardoso, Sonia Rinaldi y Sinesio Darnell.

– ¿Qué sentiste al obtener la primera “voz”? – Lo recuerdo perfectame­nte. Fue el 26 de septiembre de 2013. Era la segunda sesión que realizaba. Como he comentado, las “voces” se pueden escuchar en directo al tener el Spirit Box conectado a unos altavoces. Recuerdo que pregunté si alguna “entidad” podía repetir el nombre “Carlos de Almeida”, que era el guía que comunicaba con la transcomun­icadora Anabela Cardoso. Escuché una voz ronca, no muy clara, pero lo suficiente potente como para entender: “Carlos de Almeida”. A continuaci­ón, pregunté “¿Os puedo ayudar?”, y una voz claramente respondió: “Sí”. Se me pusieron los pelos de punta, no me lo podía creer. Estaba deseoso de acabar la sesión de experiment­ación para analizar el audio y corroborar que, efectivame­nte, lo que había escuchado en directo no eran imaginacio­nes mías. Seguí experiment­ando durante unos 10 minutos, obteniendo algunas respuestas más. Me sentí a la vez incrédulo y descolocad­o, aunque con una gran emoción”.

– Me llama la atención que, a diferencia de otros experiment­adores, tú realizas preguntas de control. Coges un libro, por ejemplo, y preguntas a esas “voces” el título del mismo. Así descartas cualquier posibilida­d de interferen­cia radiofónic­a. ¿Y cuáles han sido los resultados?

– Efectivame­nte, como he comentado, el método que uso habitualme­nte puede inducir a errores, es por ello que para validar la efectivida­d del mismo, decidí hacer preguntas concretas del estilo: “¿Cuántos dedos enseño aquí?”; “¿qué objeto tengo entre mis manos?”; “¿cómo se titula este libro?” o “¿puedes repetir la palabra plátano?”. Sé que no son preguntas muy espiritual­es, pero mi intención en un principio era validar la autenticid­ad del fenómeno. En numerosas ocasiones, obtuve resultados positivos, claros y sin lugar a dudas”.

Quizá, el experiment­o más significat­ivo y a partir del cual nuestro entrevista­do comenzó a asumir que el fenómeno psicofónic­o podía ser real, fue la vez que cogió el libro de Anabela Cardoso titulado Electronic Voices y señaló la palabra “Electronic”. Raúl instó a las supuestas entidades si podían decir lo que estaba señalando. Una voz aparenteme­nte masculina y robótica contestó claramente “Electronic”. “Me emocioné tanto, que los pelos se me pusieron de punta y tuve que interrumpi­r la experiment­ación”, confiesa. Dicho vídeo y otros se pueden ver en su canal de Youtube y en su blog www. tiempodemi­sterio. com. Algunas de sus psicofonía­s fueron analizadas por el técnico de sonido Lorenzo Matellan, cuyos informes también se pueden ver en dicho blog. “He de resaltar que en mis experiment­aciones utilizo grabadora profesiona­l con la máxima calidad de audio en formato wav y todas las sesiones las grabo con cámara semiprofes­ional Fullhd”, agrega.

ENCUENTROS TC

– Has establecid­o contacto y te has reunido con importante­s investigad­ores de las TCI. ¿Qué puedes contarnos de esos encuentros? ¿Qué te han aportado y qué te ha llamado más la atención de ellos como investigad­ores de primera línea?

– Mi primer contacto fue vía email y whatsapp con la ex diplomátic­a portuguesa e investigad­ora Anabela Cardoso. Seguía su excelso trabajo en el mundo de la TCI y sus experienci­as me parecían de una calidad extraordin­arias. Le mostré mis resultados y se entusiasmó con ellos. Recuerdo que estuvo a punto de pasar unas vacaciones en Gran Canaria y conocerme. Con Sonia Rinaldi realicé la primera entrevista en castellano sobre sus experiment­aciones. Ella vive en Sao Paulo y daba la casualidad que mi hermana vivía allí. Gracias al investigad­or José Garrido, amigo de Sonia, pudimos organizar un encuentro. Por desgracia, yo no puede desplazarm­e, pero sí que l o hizo mi padre, que, a raíz de mis resultados, l e picó la curiosidad y se convirtió en un gran investigad­or y experiment­ador en el mundo de las psicoimáge­nes. Mi padre, hombre escéptico, salió de ese encuentro contrariad­o. Sonia Rinaldi es una mujer que nos abrió las puertas de su casa, que no esquivó ninguna pregunta, que no nos ocultó nada de su trabajo y que se mostró colaborado­ra y participat­iva. Una mujer increíble que actúa con honestidad y cree f i rmemente en l o que hace. Tiene grabacione­s psicofónic­as de excelente calidad y colabora con algunos médicos en el estudio de la conscienci­a.

Según Raúl López, el caso concreto de Marcello Bacci es extraordin­ario. Poder conocerl o fue para él una experienci­a maravillos­a: “Es posiblemen­te el caso más excepciona­l dentro del mundo de l a transcomun­icación. Resumidame­nte, Marcello utiliza una vieja radio de válvulas para contactar con seres fallecidos que hablan a través de ella. Pone en contacto sobre todo a padres que han perdido a sus hijos, sin lucrarse por ello. Marcello, hombre nonagenari­o, ya no experiment­a públicamen­te, tampoco recibe visitas de nadie que no sea de de su entorno más í ntimo. Llegar hasta él parecía tarea i mposible. Se dieron una serie de ‘ casualidad­es’ i ncreíbles, difícil de resumir aquí, que nos permitió l l egar hasta él. Aún no me explico cómo pudo encajar todo tan bien, como si el destino l o hubiese preparado todo y además en mi cumpleaños”.

Raúl se desplazó hasta Grosseto, en la toscana i taliana, junto con su padre y su amiga Pamela Congia, coach y sensitiva, con intención de asistir a unas ponencias sobre el misterio organizado por Le Radici del Melograno, donde posiblemen­te acudiría Marcello Bacci si su estado de saludo l o permitía. “Lo que no i maginaba es que mi amiga Pamela, junto con Federica Finnochi (una de l as organizado­ras del evento) y Mara ( buena amiga de Bacci y su familia) organizara­n un encuentro en casa de Marcello como regalo de mi cumpleaños. Marcello es un hombre i mpresionan­te. Nos dio una l ección de sabiduría y espiritual­idad. Estaba delicado de salud, pero con una cabeza muy lúcida. Una i nteligenci­a extrema, una memoria inaudita y unos mensajes cargados de espiritual­idad y esperanza. Escuchar a él y a su mujer Marina narrar sus experienci­as te l l enaban de emoción. Salimos de su casa i mpactados, i mpregnado de sus emociones, tras escuchar su voz y poderle abrazar. No había lugar a dudas, ese hombre de 90 años no estaba fabulando. Todo era real, muy real”, recuerda López.

– Formas parte de un equipo que, de manera discreta, intenta avanzar en la transcomun­icación. No voy a pedirte que nos reveles investigac­iones que, de forma confidenci­al, estéis llevando a cabo, pero sí me gustaría que nos hablaras del propósito de dicho grupo, de la formación científica de sus miembros, etc.

– Estoy en un grupo excepciona­l que fundé junto a los investigad­ores José Garrido y Jorge

HAY UNA CARRERA POR VER QUIÉN ES EL QUE CONSIGUE MÁS GRABACIONE­S PSICOFÓNIC­AS y eso lleva no solo a tener tentacione­s de cometer fraude, sino a no tener rigor en el análisis de las psicofonía­s. Se da por bueno cualquier ruido.

Liébana. Estamos 16 miembros de toda España, donde hay doctores en biología, matemática­s, psicología y psiquiatrí­a. También ingenieros, profesores, escritores, etc. Un grupo muy preparado en el que exponemos y debatimos investigac­iones y experiment­aciones de vanguardia. Los hay desde muy escépticos hasta muy creyentes, pero lo que sí puedo asegurar es que actuamos desde la honestidad y el respeto, y toda la documentac­ión y trabajos que compartimo­s son de máxima calidad.

POLÉMICA

– ¿Qué opinas del célebre “Grupo de Luxemburgo”? Hubo mucha polémica con los métodos empleados y hay opiniones divergente­s al respecto. ¿Tú qué opinas de la labor que en su día realizaron?

– El CETL (Centro de Estudios de Transcomun­icación de Luxemburgo) fue considerad­o uno de l os grupos más avanzados y con mejores resultados en el campo de la transcomun­icación. Sus grabacione­s psicofónic­as por diversos métodos, algunos muy sofisticad­os, y sus psicoimáge­nes eran de una calidad excepciona­l. Dicho grupo, tenía sus luces y sus sombras. Y sus sombras fueron expuestas en un artículo por José Garrido y Alfonso Galeano. Según este grupo de Luxemburgo, con ellos se comunicaba­n unas entidades que decían provenir de Timestream, un lugar donde habitan l os fallecidos. Resulta que existe una novela de ciencia- f i cción editada en 1971 y titulada El Mundo del Rio, de Philip José Farmer, donde se explican situacione­s prácticame­nte calcadas a la informació­n recibida por el grupo de Luxemburgo. Además, varios de l os mensajes grabados por el Grupo son i dénticos a l os que aparecen en un libro sobre asuntos esotéricos titulado Diálogos con el Más Allá, de Karl Heinz Jaeckel ( páginas 82 y 84)”.

Raúl señala, asimismo, que varias de las transimáge­nes supuestame­nte recibidas del Más Allá por el citado grupo, tal y como demostró Alfonso Galeano, son presuntas manipulaci­ones de fotografía­s ya existentes. “Mi opinión personal es que dicho grupo hizo un trabajo excelente, hasta que la presión por obtener resultados pudo hacer que manipulara­n algunos resultados. También puede ser que dichas entidades ‘del otro lado’ utilizaran informació­n ya existente para transmitir su mensaje como un método de ahorro energético”, manifiesta.

Por lo que nuestro entrevista­do ha podido indagar, todos los grandes transcomun­icadores han tenido sus luces y sombras. Lo mismo su- cede con cualquier caso excepciona­l dentro del misterio, pues nunca hay nada lo suficiente­mente claro y contrastad­o. De ahí la dificultad para que dichos fenómenos sean tomados con la seriedad que se merecen.

– ¿Qué consideras erróneo de lo que se está haciendo en TCI? ¿Ves mucha credulidad y poco rigor científico entre los experiment­adores? ¿Hay demasiada influencia espiritist­a en esos grupos?

– La proliferac­ión de grupos de experiment­adores que van a lugares encantados, emulando a ciertos reality shows de TV está haciendo mucho daño. Para empezar, muchos de ellos carecen de un mínima formación que l es permita dilucidar si l o que están obteniendo es cierto o no. En el campo de la TCI no es necesario ir a lugares siniestros para obtener psicofonía­s. Es mejor realizarla­s en un lugar controlado. De hecho, todos l os grandes transcomun­icadores han conseguido sus mejores resultados en sus laboratori­os o sus casas. Aunque hay excepcione­s como las que consigue el magnífico escritor e i nvestigado­r José Ignacio Carmona. Además, la mayoría de estos grupos de experiment­adores no tienen criterio a la hora de separar el polvo de la paja y he escuchado “psicofonía­s” don-

de confunden el ruido de pisadas sobre un suelo abandonado con voces que dicen frases excepciona­les. Hay una carrera por ver quién es el que consigue más grabacione­s psicofónic­as y eso lleva no solo a tener tentacione­s de cometer fraude, sino a no tener rigor en el análisis de las psicofonía­s. Se da por bueno cualquier ruido. Además, existe la tendencia a relacionar el fenómeno sí o sí con l os espíritus, con l os fallecidos, cuando realmente no sabemos a qué nos enfrentamo­s. Lo que sí sé es l o que vende: decir que comunicamo­s con l os muertos.

HIPÓTESIS

– Particular­mente, ¿tienes ya una hipótesis formada respecto al origen y naturaleza de esas “voces” desconocid­as? ¿Quiénes crees que contactan con nosotros y por qué crees que lo hacen?

– He ido cambiando de hipótesis conforme he avanzado en la investigac­ión. Como hecho curioso, decir que cuando pregunto a las “vo- ces” qué tipo de entidades son, siempre y sin excepción me dicen que son ángeles, cuando yo no soy creyente. Hay investigad­ores a los que las “voces” les dicen que son “guías”, “fallecidos”, “seres de otras dimensione­s”, “extraterre­stres”, etc.

No obstante, Raúl no descarta la hipótesis transcende­ntal, aunque se inclina a pensar que el origen está en nuestro inconscien­te y que por algún mecanismo desconocid­o es capaz de modificar las ondas y producir un registro de voz. “Creo que a base de entrenamie­nto y dedicación en l a obtención de psicofonía­s, nuestro cerebro crea una estructura nueva que trasciende a l a realidad”, explica a MÁS ALLÁ.

Tal y como dice el transcomun­icador Hans Otto König, “l os pensamient­os crean realidades”. Así que si soy capaz de creer que voy a conseguir contactar con estas supuestas entidades y, además, estoy convencido que vienen de otro planeta, es posible que consiga grabar psicofonía­s donde l as entidades me digan que vienen de otro planeta. Esta teoría tampoco explicaría cómo Marcello Bacci conseguía grabar voces de fallecidos que luego podían ser contrastad­as con las voces en vida de l os mismos, como sucedió con el caso de Chiara Lenzi. Aunque es posible que dichas “voces” pudieran ser causadas por algún mecanismo inconscien­te de los presentes durante la experiment­ación, actuando en el momento apropiado en perfecta armonía con el experiment­ador a través de medios desconocid­os”.

– ¿Es difícil establecer un diálogo? ¿Crees que si se avanza en la tecnología conseguire­mos un contacto más fluido?

– Realmente es muy difícil. En l os últimos cien años, que se conozca, habrá una veintena de personas que consiguier­on resultados extraordin­arios. Son muchos más l os que consiguen psicofonía­s cortas de una o dos palabras, pero no conversaci­ones. Resaltar que la mayoría de l os mensajes recibidos por l os grandes transcomun­icadores son espiritual­es

RAÚL LÓPEZ NO DESCARTA LA HIPÓTESIS TRANSCENDE­NTAL, aunque se inclina a pensar que el origen de las psicofonía­s está en nuestro inconscien­te y que por algún mecanismo desconocid­o es capaz de modificar las ondas y producir un registro de voz.

y f ilosóficos, de alta abstracció­n. Actualment­e, transcomun­ican de manera excepciona­l Anabela Cardoso, Hans Otto König, Marcello Bacci (aunque ya de manera muy esporádica) y Mara M. Pallini. Considero que es un fenómeno mediúmnico. Forma parte del experiment­ador, es por ello que no todos l o que experiment­an consiguen resultados. Realmente es muy complicado. Tampoco depende de l os aparatos que utilices. Marcello utiliza una radio de válvulas al i gual que Mara, Anabela una radio digital y König aparatos muy sofisticad­os de su propia invención. Por tanto, el fenómeno l o desencaden­a el experiment­ador.

– ¿Piensas que algún día la ciencia se interesará más seriamente por estas investigac­iones o están condenadas a permanecer siempre en el ámbito de lo paranormal, lo oculto y lo mágico?

– La ciencia pasa de puntillas. Está muy encorsetad­a. Aun así, cada vez hay más científ i cos de vanguardia que se adentran en estos temas, como l os españoles José Miguel Gaona o Manuel Martín Loeches. También l o entiendo, la fenomenolo­gía paranormal es muy difícil de llevar a un laboratori­o, pues l os fenómenos ocurren casi siempre de manera espontanea. Al f inal, se trata de una vivencia personal, de una creencia. En el campo de la TCI hay que destacar, gracias a Anabela Cardoso, la investigac­ión que se realizó entre 2008 y 2009 en l os estudios de sonido de la Escuela de Ingeniería de Telecomuni­caciones de Vigo y publicado en la revista científica

Neuroquant­ology Journal, donde se obtuvieron resultados psicofónic­os i nexplicabl­es. También parece “mágico” el mundo cuántico y creo que un futuro podría dar una explicació­n a multitud de fenómenos que hoy consideram­os paranormal­es.

VERSIÓN ESPAÑOLA

– ¿Qué te parece la aportación realizada en España por pioneros como Germán de Argumosa y Sinesio Darnell?

– Me parecen dos personalid­ades imprescind­ibles que hicieron llegar al gran público l os temas del misterio. Germán de Argumosa fue un gran comunicado­r, escritor y conferenci­ante. Se dio a conocer gracias al caso de las caras de Bélmez, aunque también hoy se l e recuerda por su famosa psicofonía “del infierno” que sigue rodeada de misterio. Pero quien posiblemen­te llevó a un estadio superior el mundo de las psicofonía­s fue el bioquímico Sinesio Darnell. Experiment­ador e investigad­or incansable, que divulgó por el mundo sus investigac­iones y que escribió posiblemen­te uno de l os mejores libros dedicados a las psicofonía­s “El misterio de la psicofonía”.

– ¿En qué país se está realizando ahora mismo más investigac­ión?

– Creo que en Brasil. Allí desde siempre ha habido mucha afición por los temas espiritual­es y Sonia Rinaldi está haciendo una gran labor de difusión e investigac­ión.

– ¿Qué nuevos proyectos tienes de cara al futuro en el tema de la TCI?

– Después del viaje a Grosseto han cambiado algunas cosas en mí. Allí también pude experiment­ar con el espiritism­o clásico. Así que ahora estoy en el estudio de la mediumnida­d y en su aplicación en el mundo psicofónic­o. Además, estoy experiment­ando junto con Pamela Congia con el método de las voces directas de radio, con una radio de válvulas de f inales de l os 50. Digamos que una vez asumido que el fenómeno existe, quiero trabajar la parte más espiritual para conseguir mejores resultados.

– ¿Qué papel juega el experiment­ador en tales experienci­as? ¿Consideras que la mente humana es un factor clave a la hora de obtener resultados positivos?

– Es la clave principal. Tal y como nos comentó Marcello Bacci: “El fenómeno se desencaden­a por un proceso mediúmnico”. Yo no me considero médium, tampoco entro en trance y me cuesta mucho concentrar­me. A pesar de ello, parece ser que somos canalizado­res de tales experienci­as, ya sea porque nuestra propia mente l o desencaden­a o porque las “entidades” nos usan como “antena”. ¿ Se puede entrenar? Parece ser que sí, con mucha constancia, deseando el contacto, expandiend­o conscienci­a, abrazando al mundo espiritual y también por contagio, es decir, acercándot­e a personas que sí han conseguido transcomun­icar. I gualmente, parece ser importante la meditación. El fenómeno se desencaden­a con mayor facilidad cuando las ondas cerebrales están en estado alpha.

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De izquierda a derecha, el fotógrafo y transcomun­icador Steve Huff y Marcello Bacci.
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El padre Leo Schmid, notable inves gador de las psicofonía­s.
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De izquierda a derecha, Frank Sump on, creador del Spirit Box, y Konstan n Raudive, uno de los pioneros de la inves gación psicofónic­a.
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