Las razones de cristóbal colón
Para muchos contemporáneos de Cristóbal Colón, la Tierra era plana, cuando se llegaba al final del camino, del mar, se caía a un precipicio insondable y sin retorno. Era una creencia extendida desde tiempos inmemoriales que, sin embargo, no se correspondía con la realidad.
Los problemas llegaban al calcular las dimensiones de la Tierra, se creía que nuestro planeta era mucho más pequeño de lo que es en realidad. Así el propio Cristóbal Colón, creía que la Tierra era redonda y de menor tamaño, y que si navegaba hacia oeste acabaría llegando a las lejanas tierras del este (Oriente, Japón) mucho antes que por la ruta normal, solo debía cruzar el océano Atlántico… Cristóbal Colón no tuvo en cuenta que la circunferencia de la Tierra era mayor y que, en medio, podía encontrarse con todo un continente… ¿O tal vez si?
Cristóbal Colón quería abrir una nueva ruta marítima hacia Asia Menor sin rodear África ni costear por Arabia, quería llegar de forma rápida y efectiva y para ello consultó mapas muy antiguos y viejos tratados sobre las dimensiones de la Tierra, calculando –para él– con “precisión” las dimensiones reales: el resultado fue una equivocación que casi le cuesta la vida a él y a su tripulación, pero que los días de navegación y las excusas hicieron que salvaran la vida llegando a las costas de las islas del Caribe.
Cristóbal Colón estaba tan seguro de descubrir esa nueva ruta que se embarcó en convencer al rey de Portugal y, posteriormente, a los reyes de España; pero algo no convenció en sus declaraciones: si Cristóbal Colón quería abrir una nueva ruta y llegar antes al mercado de Oriente… ¿Por qué solicitó el virreinato de las tierras descubiertas? Y es que el descubridor al servicio de la corona española se guardaba, sin duda, un as en la manga: sabía que más allá del Atlántico había tierra por descubrir.