Los pecados de los jesuitas
La influencia de los jesuitas a lo largo de la Historia es innegable. Y es que no han sido solo una de las órdenes religiosas más importantes a lo largo de sus cinco siglos de existencia, sino una de las más poderosas. No en vano, la Compañía de Jesús pertenece a lo que se podría denominar como nobleza de la Iglesia, un rango que ha hecho que esta orden fuera tan admirada como criticada.
Y es que, desde que la fundara San Ignacio de Loyola, la orden de los jesuitas ha sufrido también la persecución, siendo incluso obligada al destierro.
Pero, pese a estos períodos oscuros en los que los jesuitas han tenido que purgar sus pecados, es innegable que su influencia ha llegado hasta las cotas más altas de la Iglesia católica. Algo que es fácilmente comprobable en hoy en día, puesto que el acutal Papa, Francisco I, pertenece a dicha orden.
Dejando esto a un lado, lo que es innegable es que el misterio y el secretismo aún rodean a la Compañía de Jesús, debido a que existen muchos interrogantes sin respuesta: ¿Por qué San Ignacio dotó a la orden de una impronta militar, convirtiéndola en los Soldados de Dios? ¿Qué pretendió el santo al redactar los Ejercicios espirituales? ¿A qué se debe que la Compañía haya sufrido tantas tensiones externas e internas? ¿Qué razones hay para que despierten tanta atracción como recelo?