LA ÚLTIMA ANOTACIÓN
en el cuaderno de bitácora del capitán Briggs era del 25 de noviembre, a las ocho de la mañana. Esto indicaba que el barco llevaba 9 días navegando a la deriva cuando fue encontrado.
Por si todavía no hubiera demasias incógnitas, se describió cómo en una de las literas fue hallado un almohadón que todavía conservaba la huella de la cabecita de la pequeña como si esta hubiera continuado durmiendo, ausente a cualquier preocupación y sin sospechar cuán breve sería su destino, hasta unas pocas horas antes de que el barco fuera hallado navegando a la deriva… Todos estos detalles – cuya versión todavía predomina en programas televisivos de misterio y páginas de internet– fueron copiados de unos autores a otros a partir de los distintos relatos literarios que se inspiraron en el caso real del Mary Celeste…
Sophia Matilda,
suceso para escribir un relato corto:
Este fue publicado en enero de 1884 en las páginas del
La historia narra el testimonio en primera persona de un médico, el doctor
que habría embarcado en el Marie Celeste (sic), siendo testigo de los extraños sucesos acontecidos a bordo: la misteriosa desaparición de la esposa y el hijo pequeño del comandante habría sido el detonante para su suicidio en circunstancias no aclaradas. A partir de ahí, se sucedió una cadena de extraños crímenes tras los cuales se encontraría un polizón escondido en el barco.
Estas circunstancias contribuyeron a que la historia – reimprimida al año siguiente en el unida a su enorme difusión entre el gran público, fuera tomada como un testimonio real que pretendía resolver el enigma del Mary Celeste.
Varios años después, en 1913, la mítica revista cuyas páginas abrigaran las aventuras del inmortal detective, convocó un concurso de relatos que, mezclando datos reales e imaginaros, pretendía ofrecer una solución al enigma que planteaba la misteriosa desaparición de los tripulantes del Mary Celeste. Fue entonces cuando aparecieron pretendidos supervivientes que ofrecieron sus testimonios a los periódicos, y cuyos detalles luego se fusionaron con los relatos fantasiosos que, sobre este “barco fantasma”, han llegado hasta nuestros días…
Entre estos testimonios destacó el de un tal pirata embarcado en un buque negrero que, habiéndose cruzado en su ruta con el Mary Celeste, habría hecho prisioneros al capitán Briggs y sus hombres. Luego, la nave se habría hundido sin dejar más supervivientes que el testimonio que habría esperado cuarenta años a contar lo sucedido…
El escritor (1863-1945), especuló con la posibilidad de que un psicópata embarcado en el Mary Celeste hubiera provocado una cruel matanza entre su tripulación, tras degollar uno a uno a cada uno de sus miembros, arrojándolos luego por la borda y suicidándose después. Mientras que el británico (18611955), prefirió escribir un relato aún más surrealista: una erupción marina habría dejado escapar unos gases tóxicos provocando la enajenación mental de los marineros, quienes habrían terminado empujándose unos a otros por la borda.
Demetrius, Arthur Morrison Horace Annesley Vachell