EL VALOR DEL AGUA
Abrimos la caja de Pandora para averiguar por qué las teorías del azucarillo se disuelven como uno de ellos en el café.
La homeopatía sigue dando que hablar. Extrañamente.
“A mí me funciona” parece ser el mantra de los defensores de la homeopatía, que cada cierto tiempo resurge como debate y que ahora vuelve a estar de plena actualidad. Se basa en el tratamiento de diferentes dolencias utilizando la molécula que causa la enfermedad pero diluida en grandes cantidades de agua. Dicen que puede contribuir a la sanación. ¿Verdad o mito?
Vamos a dejarlo claro desde el principio: la homeopatía no funciona. De hecho, una terapia que combate la enfermedad con la misma sustancia que causa sus síntomas, pero increíblemente diluida en agua, debería ser sospechosa por naturaleza. Pese a todo, se resiste a desaparecer. De hecho, últimamente se ha hablado mucho de la retirada de los productos homeopáticos del mercado, pero sigue habiendo mucha confusión al respecto. En la homeopatía, el diagnóstico se basa en la búsqueda de los síntomas y de la manera particular de reaccionar frente a ellos, según explica Enrique de Juan González de Castejón, médico y homeópata con consulta en Madrid.
¿HOMEOPATÍA EN RETIRADA?
El pasado octubre, la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios exigió vía BOE la adecuación a las condiciones por las que un medicamento está autorizado, registrado y puede ser comercializado como tal. Ordenó claramente la retirada del mercado farmacéutico de determinados productos homeopáticos; es decir, todos los que no están en la lista porque no han podido evidenciar nada científicamente.
"Realmente, Sanidad no ha retirado ningún producto homeopático”, explica De Juan. “Se podrá seguir comprando en las farmacias, ya que Europa garantiza su comercialización en todos los estados miembros. Lo que sí se ha hecho es crear un nuevo ordenamiento jurídico para este tipo de sustancias. Me sorprende la situación de mala información que hay al respecto; los remedios se van a seguir comprando", asegura.
"Sanidad ha dado un plazo a los laboratorios que fabrican homeopatía para que actualicen sus registros. Algunos optan por no volver a registrar remedios que no les eran rentables", dice José Luis Cidón, doctor en Medicina por la Universidad de Salamanca y homeópata con consulta en Madrid.
Incluso los profesionales del sector farmacéutico son protagonistas en este debate. "Lamentablemente, creo que es sobre todo por motivos económicos”, asegura Bibiana Sotelino, de farmacia Salcidos de A Guarda (Pontevedra). “Es una campaña mediática de desprestigio en la que se están dando datos de casos aislados de personas desesperadas como si fueran habituales. Los medicamentos homeopáticos son tan seguros que se pueden utilizar en pacientes polimedicados, embarazadas y niños", afirma.
LAS POSTURAS OFICIALES
El Ministerio de Sanidad ya ha tomado las primeras medidas: ha solicitado a la Comisión Europea la modificación de la directiva que establece un código comunitario sobre medicamentos. Esa modificación excluye a la homeopatía como medicamento y estudia la posibilidad de poner en marcha todos los mecanismos legales para controlar que los productos homeopáticos que se mantengan en el mercado estén autorizados. Además, el Ministerio hace hincapié en la obligación de informar con veracidad y claridad para evitar que los tratamientos avalados por la evidencia científica sean sustituidos por la homeopatía. En realidad, todos los países de la UE están a favor de que los productos homeopáticos demuestren de manera científica su eficacia. Los peros vienen con la barrera que ejercen dos grandes laboratorios, estandartes del negocio homeopático: Heel y Boiron. “Estos negocios son una importante inyección económica para Francia y Alemania, de donde son originarios. Nos encontramos ante un interés económico puro y duro”, comenta Raquel Blasco, vicepresidenta del Colegio de Médicos de Valladolid, miembro de la Real Academia de Medicina y Cirugía de Valladolid y profesora de Medicina. En Francia, Suiza o Reino Unido, la homeopatía está financiada parcialmente por el sistema de salud.
LEGALES SÍ, HOMOLOGADOS NO
Hablar de homeopatía es referirse más a la homologación que a la legalidad: más de 12.000 productos homeopáticos en las farmacias. A todos ellos se les dio plazo hasta el pasado octubre para homologarse. Tan sólo se presentaron 2.008. Para el resto iba a ser imposible su homologación, porque no existía principio activo alguno. "Es intentar homologar agua, sin más”, asegura Raquel Blasco. “De esos 2.008 productos, sólo ocho pueden demostrar de alguna manera que tienen cierta eficacia. Tienen hasta el 31 de enero para presentar las alegaciones científicas. En caso de no alegar nada, tendrán que retirarse de la farmacia y venderse en las parafarmacias, los herbolarios o los quioscos de prensa si fuera necesario", sentencia. ¿Y la Seguridad Social? Actualmente no hay ningún producto homeopático financiado por el sistema nacional de salud. "En España recibimos muchas presiones de Europa, debido al interés económico que hay en ciertos países al respecto”, explica Blasco. “Se puede retirar la homeopatía, pero legalmente no es tan sencillo. Podrán llamarlo producto homeopático, pero jamás medicamento", sentencia.