Cuestión de tiempo
Para nuestro colega Andrew Tracey –especialista en fitness– la clave no está solo en lo que comes, sino en cuándo lo comes.
“Hay que tener claro que la base de cualquier dieta para perder peso es reducir la ingesta de calorías. Es la condición esencial para que funcione. Dicho esto, el momento del día puede tener un efecto decisivo en cómo utiliza el cuerpo esas calorías. Yo recomiendo guiarse por el horario de entrenamiento para las ingestas más abundantes y tomar, por ejemplo, un plato con base de carbohidratos más o menos una hora antes del ejercicio y una buena dosis de carbohidratos y proteínas después. Una buena carga de energía garantizará un mejor rendimiento y resistencia, con los que quemarás más calorías sin agotar los depósitos de glucógeno. Sea cual sea tu dieta, si te aprovisionas de calorías antes y después del entreno, rendirás más y te recuperarás mejor que si las distribuyes a lo largo del día”.