PON A PRUEBA TU FASCIA
Los movimientos que ejercitan este tejido no son algo nuevo, pero sí la forma de llevarlos a cabo. Utiliza pesos ligeros para ganar rapidez y agilidad. El objetivo es poner a prueba la fascia con movimientos en diferentes direcciones para forzar al tejido conectivo a reaccionar con rapidez cuando volvamos a poner los pies en el suelo, y a las contracciones. Haz, al menos, un ejercicio de cada grupo a la semana.