Duelo MH.
Las pistolas de masaje se han convertido en tendencia. ¿Significa eso que los rodillos de espuma se han quedado obsoletos? Vamos a averiguar cuál es más práctico y beneficioso.
PISTOLAS
Es el tiempo máximo recomendado para una sesión, durante la cual no se deberían dedicar más de 2 minutos a masajear cada grupo muscular.
Un estudio reveló que usarla tras entrenar podría acelerar la recuperación estimulando el flujo sanguíneo. Pero no hay más certezas.
Las nuevas pistolas conectadas casi no causan dolor. Y su uso en terapias con sesiones de 15 minutos puede acabar con los puntos gatillo.
Ya hay modelos con bluetooth que permiten recibir a través del móvil sesiones de coach de 15 min, que acaban con los puntos gatillo.
Según el modelo, puede variar entre un zumbido silencioso y el estruendo del metro. Pero en la mayoría se asemeja al ruido del microondas.
Puedes encontrarlas hasta por 4 euros, pero las más baratas de marcas fiables son casi más caras que el mejor rodillo de espuma.
RODILLOS
Es el máximo de minutos que se recomienda usar el rodillo durante una sesión. Sobrepasar ese límite puede resultar contraproducente.
Rodar durante el calentamiento puede mejorar el rendimiento, y después de entrenar reduce el dolor y el tiempo de recuperación.
Para que sea efectivo hay que dedicar, al menos, 90 s a cada grupo muscular. La técnica es compleja y puede resultar molesto de usar.
Por otro lado, se alega que la acción de rodar sobre el rodillo es mucho más efectiva para producir la liberación miofascial.
Las sesiones con rodillos se pueden hacer en un silencio meditativo. Y uno de sus beneficios es activar la conexión mente-músculo.
Los básicos de calidad cuestan a partir de 10 euros, y con la nueva generación de rodillos vibratorios puede subir por encima de los 100.