Después de tatuarte…
Ya es oficial, te has hecho un tatuaje. Ahora toca cuidarlo. El doctor Carlos Morales Raya (dermatólogo con clínica en Madrid) apunta que el tatuaje es como una herida abierta. Si no te preocupas por cuidarlo y mimarlo puedes provocar la aparición de cicatrices o que se decolore. Aquí sus trucos para que todo vaya como la seda.
LIMPIARLO… SUAVEMENTE
Al igual que con cualquier otra herida, hay que mantenerla limpia para evitar infecciones, así que lávate las manos antes de lavar el tatuaje. A continuación, limpia el tatuaje y la zona que lo rodea con suavidad, pero a fondo. El doctor Morales recomienda el gel de baño con pH neutro. Siempre cada mañana y cada noche, antes de aplicar una loción oclusiva (véase el siguiente paso) y hasta que esté perfectamente curado.
LUBRICA LA ZONA
Tu piel después del tatuaje es extremadamente sensible y propensa a sufrir daños. Aplicar vaselina por encima puede ayudar a evitar que las bacterias infecciosas le dañen. Aplica una buena capa, pero con cuidado. El roce de la piel puede causar inflamación alrededor.
PROTEGERSE DEL SOL CON FOTOPROTECCIÓN
Durante la primera semana después del tatuaje, el doctor Morales Raya recomienda cubrir la zona con un vendaje para evitar el daño solar. Una vez que la herida inicial se cure, es posible que notes descamación y sequedad. Ahora es el momento de aplicar un protector solar de base mineral con óxido de zinc que sea SPF 50+. “Los solares infantiles son una buena elección”, apunta el doctor.
NO BAJES LA GUARDIA
Carlos Morales Raya dice que hay que estar atento a los picores, el enrojecimiento, el pus o la inflamación –signos de una reacción alérgica– hasta seis meses después del tatuaje. El cuerpo puede decidir que no le gusta y reaccionará engrosando la zona o supurando. Afortunadamente, el dermatólogo señala que ve menos reacciones alérgicas en gente con tatuajes porque los tatuadores están usando mejores tintas. Pero si en algún momento tienes algunos de estos síntomas o reacciones… vete a ver al dermatólogo.