AUMENTA LA INTELIGENCIA EMOCIONAL
1. AUTOCONOCIMIENTO EMOCIONAL
Es fundamental que te empieces a conocer. López-Acevedo te invita a “aprender a identificar, poner nombre y expresar tus emociones. Es importante evitar entrar en un estado de inhibición emocional (incapacidad de expresar la emoción que estés experimentando)”. Deja de manipular tus emociones.
2. CONTROLA TUS EMOCIONES
Las técnicas de autorregulación emocional te permitirán detectar las señales que emites de, por ejemplo, frustración, ira, ansiedad o alegría sin mesura. Gracias a estas técnicas, podrás reflexionar sobre tus emociones, para así controlar los impulsos y transmitir emociones controladas dentro del contexto de cada momento. Además, “también te permitirá aprender a diferir la recompensa al momento adecuado, sin dejarte llevar por los beneficios a corto plazo”, puntualiza López-Acevedo.
3. NO PIERDAS EL FOCO
López-Acevedo insiste en poner el “foco de la atención en los motivos que nos aproximan a nuestro objetivo, y para los cuales, las competencias emocionales añaden fuerza” animando a “plantear los problemas como retos, prestando atención a los aspectos diferenciales y novedosos de las oportunidades que aparecen en el conflicto” y alienta a que “busques el aprendizaje de la situación no satisfactoria, sondeando alternativas y adiestrándote en nuevas habilidades”.
4. BE POSSITIVE FRIEND
No se trata de ir por la vida estornudando purpurina, pero sí que mantengas, tal y como López-Acevedo aconseja, “el optimismo como factor protector ante la adversidad, pues favorece la relación que se establece entre las expectativas positivas y las situaciones en las que se requieren comportamientos dirigidos a conseguir objetivos difíciles, lo que hace que te enfrentes al desafío con vigor y persistencia”.