Profecías y mascaradas
Orphaned Land + In Vain + Subterranean Masquerade + Aevum
ORPHANED LAND llegaban a nuestros escenarios para presentar su nuevo disco “Unsung Prophets & Dead Messiahs”, un trabajo que ha cosechado toda clase de elogios a nivel internacional. Los israelíes se presentaban en la sala Copérnico de Madrid acompañados por In Vain, Subterranean Masquerade y Aevum, configurando una gira con potencial interés para un buen y variado número de fans.
Lo primeros en pisar el escenario fueron los italianos Aevum, con una propuesta de metal bastante operístico que pretende aglutinar elementos del metal sinfónico, metal extremo (especialmente black metal) y la teatralidad de la ópera tradicional, en un combo que, si bien parte de una premisa interesante y tiene potencial para ofrecer cosas interesantes, no terminó de cuajar completamente. La banda no disfrutó del mejor de los sonidos y el gran número de elementos presentes en su música hicieron que resultara algo complicado meterse de lleno en sus temas. La puesta en escena fue correcta, con muchas ganas de agradar y con la participación de una bailarina que reforzaba la teatralidad de la banda. Una apertura correcta pero mejorable para una noche que prometía bastante.
El segundo acto de la noche fue para “Subterranean Masquerade” y aquí la cosa cambió radicalmente. La banda tiene ya una trayectoria relativamente amplia y mucha experiencia sobre el escenario, algo que se notó desde el primer momento, con una banda que ofrece un sonido muy compacto y que sabe muy bien cuáles son sus puntos fuertes. Algunos de los asistentes tardaron en entrar en calor con el grupo, pero tras el primer tema la banda había sabido ganarse el favor del público, gracias a un setlist muy bien escogido y especialmente a una puesta en escena envidiable, con un frontman absolutamente entregado al concierto, que no solo interpretó las canciones impecablemente, sino que interactuó con el público a todos los niveles, bajando incluso del escenario para recorrer la sala.
Con temas como “Reveiling The Feeling”, “Nomad” o “Home” la banda demostró que son un grupo a tener muy en cuenta y defendió su propuesta (la más cercana Orphaned Land de todos los invitados) con un éxito innegable, dejándonos un gran concierto para el recuerdo.
IN VAIN serían los siguientes en salir al escenario y no tenían una papeleta nada fácil: Subterranean Masquerade habían dado un conciertazo y el cambio de propuesta era evidente. No obstante la banda sabe muy bien qué hacer
para ganarse al público y así lo demostraron, saliendo a escena con las pilas cargadas y las revoluciones disparadas, decididos a no dar tregua. Arrancaron con “Againts The Grain”, “Origin” y “Seekers Of The Truth” y no bajaron el pistón en ningún momento, involucrando a los asistentes en una fiesta del headbanging.
Su show sirvió de antesala para ORPHANED LAND y dejó a los asistentes calientes y con ganas de más, el mejor estado posible para recibir a los israelíes. Aunque llegaban presentando nuevo disco, Orphaned Land optaron por buscar el equilibrio en su setlist y reservaron espacio suficiente para repasar toda su discografía.
Comenzaron con “The Cave”, de su nuevo trabajo, y continuaron con “All Is One”, “The Kiss Of Babylon” y “Ocean Land” antes de volver a su nuevo largo con “We Do Not Resist”, quizás uno de los temas más controvertidos de su nuevo lanzamiento por su directo y explícito mensaje lírico. “Let The Truce Be Known” volvió a enviarnos al pasado, concretamente a “The Neverending Way Of Orwarrior”. La banda no estaba dejando espacio para la tregua y entre tema y tema Kobi Farhi nos ofrecía sus pensamientos, opiniones o las motivaciones detrás de cada tema, involucrando al público a un nivel bastante íntimo e incluso haciendo alguna broma.
Lo cierto es que me cuesta ser objetivo con este grupo, pero la carrera de ORPHANED LAND es un ejemplo a seguir para cualquiera: no tienen ningún disco, ya no malo, si no por debajo del notable, y su último trabajo es posiblemente el más completo de su carrera. Es un trabajo potente, elegante, intrincado y adictivo que el grupo siguió presentando con “Like Orpheaus”, uno de los singles del disco, que en estudio contó con la participación de Hansi Kursch de Blind Guardian, una colaboración que no se echó en falta sobre el escenario, y “Yedidi”, una adaptación de un tema tradicional israelí que podemos escuchar en “Unsung Prophets And Dead Messiahs”.
Es cierto que desde que Yossi Sassi salió de Orphaned Land la banda ha perdido algo de riqueza interpretativa en algunos temas, ya que las partes de bouzuki ahora suenan en las pistas grabadas de apoyo en lugar de ser interpretadas en directo (muchas de ellas al menos), pero también es cierto que la banda ha ganado cohesión como conjunto de metal y las guitarras suenan más potentes que nunca, como quedó claro en la interpretación de temas como “Birth Of The Three” e “In Propaganda”.
La recta final se acercaba con la interpretación de “All Knowing Eye” y la ya clásica “Sapari”, que puso a toda la sala a saltar antes de “The Neverending Way” y la imprescindible “Norra El Norra” que, como es habitual, puso el punto y final al concierto de la banda con todo el público coreando el tema y botando sin descanso.
Fue un buen show, cuyo único punto negro fue una asistencia algo pobre (ligeramente por encima de media sala), claramente debida a la fuerte competencia en el circuito de conciertos (ese mismo día había hasta 3 eventos destacados aparte de Orphaned Land) y a que la banda es razonablemente asidua a visitar nuestros escenarios (algo que personalmente agradezco mucho.