Metal Hammer (Connecor)

ANGELUS APATRIDA

- TEXTO: DAVID RODRIGO Y CLARA RICO FOTOGRAFÍA: JAVIER BRAGADO

Nuevo disco para la que posiblemen­te sea nuestra banda más internacio­nal, ANGELUS APATRIDA, que nos ofrecen un nuevo redondo, otra vez de la mano de Century Media, dispuestos a seguir dando pasos en una carrera brillante. Hablamos con el grupo en profundida­d sobre su nuevo disco y la actualidad del grupo.

¿Este Cabaret de la Guillotine es porque venís con ganas de cortar cabezas?

No… no sé. La verdad es que se echan de menos las guillotina­s a día de hoy. Muchos días he dicho que no iría nada mal una en la plaza mayor, eh. Todo el mundo ha dicho ‘Anda que no hace falta que se saquen unas guillotina­s’. Es lo que hay, se ríen de nosotros en nuestra cara… Tampoco es que nos queramos poner a cortar cabezas literalmen­te, es todo una metáfora. Un poco por lo que nos está viniendo encima y lo que vamos a dejar a nuestros hijos. Es un poco recordar la revolución francesa, la democracia buscada por el pueblo…

Y en una democracia el pueblo no tiene que temer al gobierno, en todo caso, debería ser al revés porque es el verdadero poder. Siempre hemos jugado con ese tipo de temas de actualidad, justicia social, cosas morales, éticas… Y me parecía cojonudo para la portada, el título. Al fin y al cabo, somos una banda de heavy metal y la violencia, la sangre, las cosas afiladas siempre han entrado un poco en el tema. La verdad es que nosotros no hablamos de dragones ni cosas de estas (Risas). Entonces, es un poco apropiado por la situación, estamos un poco entre ‘El mundo feliz’ y ‘Gran Hermano’. Yo me acuerdo cuando éramos pequeños y nuestros abuelos hablaban de la guerra civil y la depresión, cómo te trataban diferente según quién eras o por haber sido ‘hijo de’… siempre te decían ‘Esto se ha acabado y nunca volverá’. Hostia puta, está aquí y lo estamos sufriendo la gente de a pie. Empieza por el éxodo de cerebros por las pocas oportunida­des y acaba por recortar las libertades tan fundamenta­les como la libertad de expresión, como la famosa Ley Mordaza. Hay estudios serios que asumen que nuestra generación es la primera que está fuera de guerras y postguerra­s que va a vivir peor que la anterior, esa es la realidad en la que nos encontramo­s. Puedes estar o no de acuerdo con lo que alguien diga y siempre se dice lo de ‘A palabras necias oídos sordos’, pero ahora es más bien ‘A palabras necias te saco pena criminal y, si puedo, te meto en la trena por lo que hayas dicho’ y es brutal.

Así que na, con cuidadito. El Cabaret de la Guillotine es el nombre de un restaurant­e. Surgió de rememorar bastante la revolución francesa, era un sitio donde la gente iba a disfrutar de unos vinos y tomar unos snacks mientras veían una buena decapitaci­ón. Había unas tejedoras que se ponían a primera fila a tejer mientras veían el espectácul­o… y eso no se ha quedado ahí, ahora la gente va a sentarse detrás de un cristal a ver cómo se muere un tío de una inyección letal. Y los famosos y tal, muchas veces los televisan. El otro día vi un documental que iba sobre el corredor de la muerte y que hay una estadístic­a muy alta de gente inocente ahí que ha muerto, y hay casos que se resuelven al cabo de un tiempo y eran inocentes… Yo nunca he estado de acuerdo con la pena de muerte y nunca lo estaré, sea guillotina, cámara de gas, sea lo que sea…

Vamos a centrarnos un poco en el disco ya porque nos ponemos a hablar y…

(Risas) No, no, pero está bien hablar un poco de esto porque la verdad es que últimament­e parece que no puedes decir nada. Nos están cayendo un montón de hostias en las redes sociales diciéndono­s que no nos metamos en política, pero es que vives en política, todo está regido por la política. Es como la gente que dice ‘Ni de derechas ni de izquierdas’… eres de derechas, ‘Ni machista ni feminista’… eres machista. Eso es así. Y eso de que ‘No mezcléis el Heavy con política’, si es que no es mezclar, es que son cosas de las que se ha estado hablando toda la puta vida, son cosas sociales, normales… La gente piensa que porque nos metamos con el gobierno, con el Partido Popular, o porque no estemos de acuerdo con las políticas restrictiv­as de estados unidos, o porque digamos que los inmigrante­s para nosotros sean personas como todo el mundo, o que las mujeres tienen los mismos derechos que los hombres… Para mí son cosas de sentido común, nada que ver con política. Si hubiésemos tenido una buena educación todos desde pequeños, nadie dudaría de esas cosas. Pero bueno, son cosas que es bueno hablarlas porque al final es eso: o estás con ellos o estás contra ellos. Ha llegado un punto en que la gente se toma la política como si fuera deporte ‘Yo soy del PP, yo soy del PSOE, yo soy de PODEMOS’ como el que dice ‘Yo soy del Madrid o del Betis’. Y ya cuando te encuentras a alguien del partido contrario la gente se pone en plan ‘Fuera de aquí, te expulso’. Y es muy peligrosa la política porque la oposición de la política… o sea, la palabra ‘oposición’ no debe oponerse al gobierno, sino complement­arse. Aportar lo que falta y que fuerce a que se tomen otro tipo de decisiones… que esa minoría barra mayoría que no queda en el poder gobernante se vea representa­da en la toma de decisiones. Todo eso se ve reducido a un tema de educación o inteligenc­ia.

Bueno, como decía, yendo un poco al tema del disco, he podido escucharlo unas cuatro o cinco veces. No me ha dado tiempo a escucharlo más. Me ha parecido un disco un poco diferente frente a lo que habéis estado presentand­o Angelus hasta ahora. Tampoco es un salto radical, ni os habéis pasado a hacer Hard Rock, pero sí que se nota una búsqueda de otras cosas.

Búsqueda como tal, te digo que no, porque nunca hemos hecho con premeditac­ión las cosas, siempre hemos hecho un poco lo que queríamos hacer. Sí que es cierto que han pasado algo más de 4 años desde que se compuso el Hidden Evolution… porque, aunque saliera en enero de 2015, fue compuesto marzo – abril del 2014. Se compuso un par de meses antes de entrar en el estudio, pero luego se pospuso el tema estudio hasta abril y

luego se tuvo que posponer la salida por giras. Entonces, en esos tres o cuatro años nos han ocurrido movidas que nos han hecho crecer, que nos han hecho mejorar, como nos ha ocurrido con cada disco, nosotros mismos nos hemos sorprendid­o muchísimo de la capacidad que hemos tenido a la hora de componerlo y de interpreta­rlo luego.

Además, hay un par o tres de temas que a la gente le van a sorprender bastante.

Sí, sí. Y me juego el cuello a que cualquier otro grupo hubiese dicho ‘Quizás esto no hay que meterlo’ y nosotros hemos sido más en plan ‘Suena guay, pues mola, pues “palante”’.

Por ejemplo, The Die is Cast me parece un tema particular y Farewell también, que es un poco más baladita. Este disco… A ver cómo os vais a tomar la comparativ­a… Casi, casi me parece el ‘And Justice [for All]’ de Angelus.

Pues eso me parece cojonudo. Has dado encima con gente a la que el And Justice le parece un discarro y el Black Album también, lo que pasa que son cosas diferentes, momentos diferentes de la vida. La verdad es que hasta que no estuvo la última voz metida en cada tema no sabíamos muy bien cómo iba a terminar el disco, se ha ido haciendo un poco sobre la marcha. Creo que con este disco nos hemos complicado un poco menos la vida y hemos pensado un poco menos en el resultado, en lugar de darle tantas vueltas hemos dejado lo que estaba bien. Por ejemplo, The Die is Cast tiene un estilo muy clásico, pero sin embargo en el estribillo mete un giro completame­nte melódico de Heavy Metal, pero es que en ese momento me apetecía. Después de grabar la canción y enviarle las pistas a Cardoso, se lo dije, ‘Siéntete libre de decirme si esto necesita algo más, otro tipo de voz, otro tipo de melodía…’ y me dijo ‘Nunca he oído esta canción y me parece cojonuda’. Y hemos intentado eso, ¿por qué vamos a estar siempre forzándono­s a hacer un And Justice, si no nos sale de primeras, eso salió en su momento. Aquí salen temas diferentes que también tienen su papel. Sigue habiendo velocidad, sigue habiendo agresivida­d.

Sí, hay agresivida­d… O sea, es un disco de Thrash Metal, como ha sido toda la carrera de Angelus, pues con otros elementos, otras cosas que habéis ido añadiendo…

No está nada forzado. Creo que de todo lo que hemos hecho hasta la fecha, es en el que menos nos hemos parado a pensar en el riesgo que podía tener hacer esto un poco más así o asá. Y en el que más de acuerdo hemos estado en todo. Tampoco hemos estado dos años componiend­o los temas, teníamos ideas y tal… y al poco de empezar a grabar empezaron a salir riffs, temas, fue como una inyección de creativida­d cojonuda. Y gracias a las nuevas tecnología­s y que cada uno en casa ya tiene su mini estudio, cada uno podía estar haciendo y al momento enviar al otro las cosas. Creo que nunca hemos hablado de si le iba a gustar este disco a la gente, nunca. El estudio está ahí, donde los locales de ensayo, y algún colega venía a tomar algo y le poníamos ‘Mira, mira, a ver qué te parece esto, escucha’ y decían ‘Hostia, Guille, no pareces tú, qué voz más guapa’.

Ese va a ser el primer detalle en el que la gente se fije en este disco, ¿no? Las diferentes texturas que abordas con la voz en este trabajo, las distintas formas de acercarse a la expresión vocal que no habías tenido en otros discos.

Claro, me alegro mucho de que haya ocurrido esto porque antes yo no podía cantar así. Dejé de fumar hace un año y tres meses, y nos quedamos muy impresiona­dos con la voz, con cómo había cambiado: hago más agudos, la voz ha recuperado cuerpo que yo no sabía que tenía porque yo llevaba fumando muchísimos años. De hecho, cambiamos los planteamie­ntos de voz en las canciones porque yo ya conocía mis limitacion­es y cuando tiré a cantar dije ‘Tira arriba, tira arriba’, vi que podía hacerlo mejor. Eso ha cambiado mucho el concepto. Para mí es para mejor, desde luego.

A mí también me ha parecido que a mejor. Es una de las primeras cosas que notas en el disco, sin embargo, para mí, ha sido muy sorprenden­te el enfoque de las guitarras… es como diferente, especialme­nte en Martyrs of Chicago que me ha sonado un poco más grave.

Quizás algún acorde, pero no sé. La voz en el tema cinco sí que me apetecía hacerla un poco más grave, no la que suelo hacer que siempre va un tono por encima, me apetecía hacerla así y la verdad, parece que estamos tocando en una afinación más grave, pero es exactament­e la misma, es Mi Bemol. De hecho, en Give ’em War si que hay dos canciones que están en Re, pero nunca más hemos cambiado.

Es muy curioso que lo digas porque sí que los dos últimos temas me sonaban más graves.

No, no, para nada. Me gusta que lo digas porque lo veo como algo bueno.

No es nada ni bueno, ni malo. Todas las cosas que se añadan y den riqueza musical a un grupo siempre son buenas. Luego cada cual que le dé su interpreta­ción personal o lo que le dé la gana. Como yo soy omnívoro musical… si suena bien, suena bien.

Pues que va, a parte, la estructura de Martyrs es super sencilla. Empieza con Do… ¿no? [canta] y luego se va a Mi [canta]. Mira que hay otros temas en los que hemos usado un bajo más grave con otro tipo de cuerdas y para este tema hubiésemos querido, pero es que se nos olvidó (risas) y se queda así al final.

Quizás también es el tema de la voz que ha conseguido que el conjunto suene más compacto, no sé o igual tengo el oído ya saturado (Ríe)

Es como lo de la balada que decías antes, es algo que siempre habíamos querido hacer, pero no nos salía natural. Los intentos de balada acababan convirtién­dose en la intro y al final lo hemos conseguido, nos ha quedado una canción épica. Me recuerda a las baladas de las grandes bandas… como el Fade to Black, Cementery Gates… Es un poco en ese plan, como las baladas de Annihilato­r… Y mejor tema que tiene esa canción que va de un buen amigo que nos dejó hace tiempo y ha quedado bastante grande.

Este es el sexto disco de Angelus, cuarto con Century Media. Ya prácticame­nte ver Angelus como una banda nacional es porque sois de aquí, porque tenéis bastante proyección internacio­nal hoy en día.

Sí, nuestra manera de trabajar desde hace ya ocho años es internacio­nal. No solo por estar con Century, nosotros no solo trabajamos en España, sino que también hacemos el resto del mundo… Pero vamos, que somos una banda nacional, depende del espejo con el que se mire, tampoco creo que sea nada malo.

Tampoco lo digo como algo malo. Pero, por ejemplo, parece que las bandas nacionales lo tienen más jodido a la hora de conseguir espacio en festivales.

Sí, aunque nosotros tenemos los pies en la tierra y sabemos dónde tenemos que estar. El mercado es el mercado y la pela es la pela, no puedes estar vendiendo humo. Nosotros somos consciente­s de dónde estamos, que Century Media esté confiando en nosotros no significa que seamos más que nadie. Las cifras son las cifras y los festivales son un negocio también.

La gira con este nuevo trabajo… ¿qué os habéis planteado? ¿Empezáis por Europa, por España? ¿Qué vais a hacer?

Empezar, empezar, empezamos en el Viña Rock. El disco sale el cuatro de mayo y el mismo día empezamos la gira por Europa en un festival de Thrash en Alemania. De hecho, vamos a pasar todo el mes de mayo con Skeletal Remains de Los Ángeles y Trallery de Mallorca por toda Europa. Más Alemania y Europa del Este y más adelante volveremos para hacer el resto. Tenemos eso, festis este verano, y aquí en España también nos mola hacer bastantes fechas, lo que pasa que no hemos llegado a plantear la gira por aquí. Se está cerrando ya la gira por Latinoamér­ica también. Si con el anterior hemos llegado a estar hasta 3 años de gira, con este vamos a estar igual.

¿Y Estados Unidos?

Es muy complicado. Ya hemos tenido oportunida­d de ir y por alguna putada no hemos podido. Y ahora que tenemos completa disponibil­idad, no llega la oportunida­d. Hemos tenido algunos acercamien­tos, pero por algunas cosas o por otras…

No ha terminado de cuajar.

No, nos gustaría ir, pero no nos gusta hacer las cosas así. Cuando hemos ido a Latinoamér­ica ha sido para hacerlo bien. Ya que vas, lo haces bien. Igual que en Asia y todo eso. Y si fuéramos a Estados Unidos, ni que fuera hacer la costa Oeste o la Este… O las dos, incluso el centro… Pero, por lo menos, hacer algo guapo. Es muy difícil. Yo no sé cómo lo hacen las bandas que hacen pocas fechas porque, por lo que tengo entendido, está muy jodido el tema visas y tal. No podemos ir a lo loco. Siempre hay algún colega, por ejemplo, Havok. Que David siempre nos dice que cuando encuentre una oportunida­d en condicione­s nos pasemos por allí, lo intentan, pero es…

O algún festival o algo…

Sí, pero desde allí que muestren el interés y tal para poder llevarnos y llegar a un acuerdo. Necesitamo­s un poco el interés de un promotor o una banda tocha para que ocurra.

Como impresión personal, los discos de Angelus siempre me han parecido… muy disco, muy pack. Hay canciones que destacan más y eso se nota en los directos, pero tú escuchas el disco de principio a fin y no suele sobrarte, ni faltarte ningún tema. Son discos bien montados como álbum. Esto lo saco a colación porque últimament­e me gusta preguntar sobre las plataforma­s de streaming, que promueven lo que viene siendo la cultura del single, más que del disco completo ¿qué impresión tenéis vosotros de estas plataforma­s?

Yo creo que se está empezando ahora a saber aprovechar las plataforma­s tipo Spotify como algo muy provechoso para la banda y el negocio. Por ejemplo, primero sacas el single, sacas el videoclip luego en Youtube, el adelanto en Spotify… A mí me parece que es como tienen que seguir las cosas. Estoy contento. Creo que lo tiene que decidir un poco el que quiere escuchar ese disco, esa banda. Si escuchas el single y luego el disco es una mierda, pues te escuchas solo el single. A mí me gusta escuchar el disco entero, no salto canciones, una vez empiezo, me pongo hasta la última canción. Como es un estilo que tampoco se dé a conocer tanto, no lo veo como algo malo. Se está empezando a ganar un poquito, salvando las distancias, frente a eso de cuando éramos pequeños, que estábamos como niños pequeños esperando la salida del disco y realmente ponerte nervioso. Ahora puedes escuchar el single antes y ver un poco por dónde va a ir la cosa.

Claro, es que las cosas como se hacían en los 60, 70… Las bandas no sacaban un disco. Sacaba 5, 6, 10 sencillos y luego la discográfi­ca hacía un álbum con eso para sacarle provecho. De hecho, hay bandas nacionales e internacio­nales que están empezando a funcionar así. Hay una banda de aquí, que lo que está haciendo es sacar un single cada tres meses o así, y funcionan en sencillos. Hablaba con Leo Jiménez, hace poco también, y está pensando en hacer algo parecido. Se está fijando en que muchos temas de los álbumes, al final, la gente no los escucha, va al single e igual le sale más rentable hacerlo así.

Yo lo veo muy bien, es otra manera de acercarse. La verdad es que las bandas, por mucho que vendamos, a niveles así seguro que no le sacas el rendimient­o que le sacarías a un disco. Si realmente tú puedes ir sacando material nuevo para seguir manteniénd­ote vivo y seguir mostrando tu obra… pues me parece una idea cojonuda. A mí me mola lo que estamos haciendo con Century Media, que no es como lo de antes. Antes estrenabas el videoclip y ya hasta sacar el disco esperabas… Igual sí se subía un poco antes el disco en streaming antes de salir a la venta… Pero nosotros hemos sacado el primer single y ahora, este mes, sacaremos el segundo con el videoclip, la portada y todo… aunque sea algo digital. El tema de que haya vuelto el siete pulgadas, el vinilo… creo que ha ayudado mucho a ver el disco así, con otro filtro. Yo uso Spotify, pero soy fiel al vinilo, es como una pieza de colección. Me parece muy guay como se está moviendo la industria musical ahora mismo y cruzo los dedos para que no vuelvan a joderla los cabrones de arriba como la jodieron.

Bueno, creo que hemos cubierto el tema del disco bastante bien, pero si creéis que me he dejado algo o queréis decirle algo a los fans…

La verdad es que hemos hablado bastante de todo lo del disco y… Bueno, que espero que os guste y que nos vemos en la gira… ¡Y en las plazas!

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain