Entrevista
Transatlantic están de vuelta. El supergrupo de rock progresivo vuelve a las andadas y nos trae un lanzamiento muy especial: “The Absolute Universe”. El disco sale al mercado con la particularidad de presentarnos dos versiones diferentes, una más larga y otra más corta. Hasta aquí todo parece normal, pero lo cierto es que hay mucho más que contar al respecto, porque “Forevermore” (la versión más larga) y “The Breath Of Life” (la más corta), son prácticamente dos discos diferentes, nacidos de las mismas ideas originales. Para hablar de todo ello nos hemos puesto en contacto con la banda.
ENTREVISTA A PETE TREWAVAS
Pete, con “The Absolute Universe”, el nuevo disco de Transatlantic, nos topamos con un acercamiento diferente a lo que hemos visto hasta ahora. En ocasiones alguna banda ha lanzado una versión extendida de un disco, pero en esta ocasión vosotros nos presentáis lo que básicamente son dos álbumes diferentes con las mismas bases y premisas ¿Puedes contarme algo más acerca de la creación de este trabajo?
Fue un viaje un poco salvaje la verdad (risas). Inicialmente fuimos a Suecia a finales de 2019 para grabar el disco, pero por algún motivo no lo grabamos allí finalmente. Así que la idea era volver a casa y que cada uno fuera grabando sus partes, y así le dimos forma a una primera demo. Y luego mientras trabajábamos sobre eso, yo estaba regrabando algunas líneas de bajo y unas voces y Mike estaba trabajando con Neal en Nashville en las baterías, y alargaron algunas secciones y añadieron algunas cosas, que nos mandaron después. Por su parte Roine en Suecia también había estado trabajando y llegó un momento en el que acabamos con dos o tres versiones diferentes del material.
Había algunas secciones en las que no nos poníamos de acuerdo en cuál era el mejor acercamiento. Hablamos mucho sobre ello y no había forma de ponernos de acuerdo. Yo tenía la sensación de que el disco era demasiado largo, había algunas secciones que pensaba que podrían recortarse o quitarse… Entonces Neal nos mandó una idea que había tenido para una versión más corta del disco. Neal y yo pensamos que quedaría mejor así, pero Roine y Mike estaban más convencidos con la versión larga. Como te decía antes, llegó un momento en el que no podíamos ponernos de acuerdo en qué era lo mejor, y acabamos encontrando la solución de lanzar dos versiones diferentes. Lo hablamos con la discográfica y cuando nos dieron luz verde, nos pusimos a trabajar para que las dos versiones tuvieran su propia identidad. Neil añadió algunas cosas a su versión y Roine retocó y modificó algunas en la suya, regrabamos algunas secciones una vez más y así terminamos con dos discos diferentes nacidos del mismo material inicial. Son como dos experiencias diferentes del mismo viaje… Pero la cosa no termina ahí, porque como no podía ser de otra forma en Transatlantic, cuando Mike se estaba ocupando de la versión 5.1 decidió utilizar lo que le pareció mejor de cada una de las mezclas, por lo que acabó siendo una experiencia algo diferente a las dos anteriores también. Le dimos mucho trabajo a Rich Mouser (risas).
Así que hay tres caminos diferentes de un mismo viaje. Quien se haga con la Deluxe Box podrá disfrutar de los tres y compararlos. Es un gran viaje, creo que es una experiencia muy buena y que está a la altura de Transatlantic.
Es curioso eso. La primera vez que nos juntamos Transatlantic para hacer el primer disco, no sabíamos muy bien que esperar ni cómo iba a salir. No teníamos ni idea de cuál era el sistema de trabajo que mejor iba a funcionar para nosotros como banda ni nada de eso. Pero a medida que hemos profundizado más en el proyecto, hemos ido encontrando las dinámicas, y también nos hemos ido marcando un estándar que superar en cada disco, porque tanto los fans como nosotros mismos tenemos unas expectativas sobre lo que podemos hacer con Transatlantic.
Es algo intimidante, especialmente cuando llevamos varios años sin juntarnos ni estar sumergidos en el universo de la banda, que es algo que suele suceder porque todos tenemos otros proyectos. Así que lo que solemos hacer, y lo que hicimos esta vez, es ir guardando y preparando ideas y demos para que cuando nos juntemos tengamos bastante música sobre la que empezar a elegir y trabajar.
En esta ocasión teníamos muchísimo material, creo que solo con el de Roine había más de una hora y media de música, y luego Neal y yo teníamos unos cuarenta minutos cada uno también. Fue interesante ponernos a trabajar sobre una pila de material tan grande, y además fue una experiencia nueva porque empezamos el proceso en Suecia, que no es nada habitual para nosotros, ya que siempre lo habíamos hecho en Estados Unidos.
Debo confesar que, cuando recibí la noticia de este lanzamiento, era un poco escéptico sobre las dos versiones. Nos llegaba la explicación de cómo y porqué eran diferentes, pero pensé que simplemente sería una estrategia de marketing y que la final sería una versión normal y otra recordada, o una normal y otra extendida...
Si, entiendo. La verdad es que sabíamos que habría algunas reacciones así, y nos hemos preguntado si la gente realmente entenderá lo que hemos hecho con este lanzamiento. Estoy seguro de que quien lo escuche lo verá sin problemas. Por ahora con el single la gente parece estar bastante contenta.
Lo cierto es que después de escuchar los discos, se nota una gran diferencia entre ambas versiones incluso desde el comienzo con “Overture”…
Sí, no queríamos que la gente se encontrara con la misma pista, no tendría sentido. Hay una diferencia importante en la música de ambas versiones. Lo gracioso del asunto es que, como no tenemos un productor, siempre acaba ocurriendo que todos nos entusiasmamos y empezamos a añadir un montón de pistas y capas y detalles a las canciones y cuando se lo mandamos a Rich Mouser para la mezcla suele encontrarse que es demasiada información para un solo disco, y acaba siendo el que tiene que tomar la última palabra de lo que entra y lo que no. Así que en esta ocasión pudo aprovechar mucho mejor todo lo que teníamos y entre todos y con su supervisión hemos conseguido dos álbumes muy diferentes entre si.
Algo que también llama la atención es que han pasado siete años desde “Kaleidoscope” ¿Por qué os ha llevado tanto tiempo hacer un nuevo disco?
Bueno, hemos estado muy ocupados con otros proyectos. La verdad es que no es nada fácil encontrar un hueco en nuestras agendas que nos venga bien a todos para poder reunirnos. En esta ocasión empezamos a hablar de ello en 2018 y encontramos un hueco a finales de 2019, así que nos pusimos a buscar estudios y yo particularmente me puse a componer las primeras ideas para Transatlantic. Neal y Roine suelen pasar de un proyecto a otro sin problemas y siempre están escribiendo, pero yo normalmente necesito centrarme en qué proyecto estoy trabajando cada vez, porque no soy un compositor tan prolífico como ellos, y además le dedico muchísimo tiempo y esfuerzo a Marillion. Siempre que no estoy con otro proyecto o que tengo algo de tiempo libre, suelo dedicárselo a Marillion.
Resumiendo, nos ha llevado bastante tiempo esta vez, pero es todo cuestión de agendas.
Me gustaría preguntarte particularmente por “The World We Used To Know”, que es una de las que más me han llamado la atención en las primeras escuchas de este disco.
Bueno, es un tema de Roine. Empezamos el tema como un Groove de batería y bajo. Lo que queríamos hacer era enlazar la canción de Roine con el momento justo anterior del que veníamos, y decidimos que lo mejor para eso era empezar con la batería, así que Mike empezó a tocar y yo fui siguiéndole y fuimos montando ese Groove. Luego entramos en la canción de Roine, que la verdad es que creo que es bastante similar a como estaba en las primeras demos que nos trajo. Claro que la adornamos y la contextualizamos, incluyendo algunos motivos del disco en el fondo, y en cierto punto la movemos sobre uno de los motivos principales y más grandes del disco, para traerlo de vuelta sin perder la canción.
Normalmente lo que solemos hacer cuando nos juntamos a construir las canciones, es empezar por tocar de forma más o menos directa las ideas de todos, y vamos apuntando en una pizarra que tenemos los temas que nos van gustando más, y cuando alguno tiene el “Sí” de los cuatro, pasamos a trabajar en él. A veces son ideas o canciones completas y otras veces solo son detalles: una melodía, un riff, etc. Por ejemplo de mis ideas usamos cuatro o cinco cosas, igual con Mike… con Roine, trajo tantísimo material que aprovechamos muchas cosas, pero no muchas fueron ideas completas, si un par, pero cogimos muchos riffs, melodías y pequeñas cositas. Fue un proceso muy fluido la verdad.
¿Cuál dirías que es tu parte favorita del disco?
¡Oh! Es muy difícil ¡Porque no quiero decir que mis ideas! (risas). No, pero hay un par de mis ideas que son muy sólidas en este disco, por ejemplo una sección a la mitad de “The Greatest Story Never Ends”, de la que estoy muy orgulloso. Y “Love Made A Way”, que es una canción de Neal, me parece fantástica. Además tiene uno de los motivos que más me gustan del disco, que esta desde el principio hasta el final. Y me gusta mucho “Owl Howl”, que viene de una idea de Roine.
Hay mucho material muy bueno en este disco. “Reaching For The Sky” es muy buena también, parte de una estrofa que yo tenía y a la que Neal le hizo algunas modificaciones, le añadió unos teclados y unos arreglos y le cambió la letra y el resultado es estupendo.
Nos estamos quedando sin tiempo Pete, pero no me gustaría terminar sin preguntarte por tus otros proyectos y qué podemos esperar de Pete Trewavas además de este nuevo disco de Transatlantic:
Bueno, ahora mismo estamos trabajando en un nuevo disco de Marillion. Tenemos algunas canciones ya listas y muchas ideas que estamos trabajando con calma. Evidentemente tenemos bastantes restricciones por la Covid en Reino Unido, así que nos estamos tomando las cosas con calma. En Marillion nunca nos hemos dado mucha prisa con los discos, y ahora menos aún – tenemos algunas ideas muy buenas y muy interesantes y vamos a aprovechar este tiempo de incertidumbre para madurarlas bien y cuando grabemos el disco hacerlo lo mejor posible.