BANCO DE DURABILIDAD AKRAPOVIC
Akrapovic acaba de incorporar una sofisticada herramienta de trabajo para optimizar el diseño y la fabricación de sus sistemas de escape, reputados por su calidad y eficacia tanto en la industria del automóvil como en la de la motocicleta, y por supuesto en las motos de campo. Se trata de un nuevo banco de potencia para realizar ensayos de durabilidad y resistencia durante prolongados periodos de tiempo. Hasta ahora, dichos test se realizaban en carretera y/o en circuito con un piloto real, algo que se seguirá realizando pues en Akrapovic también dan importancia a la percepción humana. No obstante, el nuevo banco de potencia permitirá aumentar y completar el plan de ensayos, obteniendo resultados que también tendrán interés para los propios fabricantes de motos. El banco en sí es una auténtica virguería, pues es totalmente autónomo, gracias al empleo de un robot automático que se encarga de acelerar, cambiar de marcha, accionar el embrague y frenar. Sigue los ciclos de trabajo programados previamente, lo que permite una amplitud de pruebas excepcional. La sala del banco cuenta con sensores y cámaras para tomar nota de todo el test, y también permite emular ráfagas de viento de 200 km/h. Cuenta con un moderno sistema de ventilación y en épocas de bajas temperaturas reutiliza el calor del motor del vehículo en cuestión para calentar el ambiente. Incluso, es capaz de reutilizar el movimiento del rodillo del banco para convertirlo en electricidad para alimentarse a sí mismo. Esta instalación permitirá a Akrapovic optimizar la fabricación de sus escapes, no solo en cuanto a aumentar las prestaciones máximas, sino también para mejorar la durabilidad y las emisiones de sonido y gases.