Clásicas: Penton KTM 125 1968.
El absoluto dominio mundial de la marca austriaca en el segmento del off road tuvo su origen en la iniciativa de un emprendedor piloto ¡americano!
Si bien resulta cierto que los primeros escarceos de KTM con la competición off road datan de la segunda mitad de los cincuenta, ganando incluso medallas en los Seis Días de Garmisch Partenkirchen (Alemania) de 1956, dichas participaciones eran con motos de carretera modificadas, con más animo de comprobar su fiabilidad que de un interés real en la competición.
Al otro lado del Atlántico se estaban empezando a gestar unos acontecimientos que iban a cambiar la historia de KTM. John Penton era un afamado piloto americano muy comprometido con el offroad. Participante asiduo en su país, lo había hecho a los mandos de motos como Harley-Davidson, BSA y NSU, todas de carretera modificadas para campo. En una participación en los ISDT de 1962 en Alemania, comprobó como las ligeras motos europeas suponían una base infinitamente mejor para la práctica del off road. Y empezó a maquinar la idea de diseñar su propia moto en base a su experiencia con diferentes marcas. La idea fraguó en 1967, año en que participó de nuevo en los Seis Días, visitó la fábrica Husqvarna, en Suecia, con la cual mantenía una relación muy estrecha a través del importador americano. Y fue para ofrecer el proyecto al fabricante sueco, obteniendo sin embargo una respuesta negativa. La siguiente visita le llevó a KTM en Austria, y se encontró a Erich Trunkenpolz, máximo directivo, receptivo con la idea de una moto de campo ligera.
Ambas partes llegaron a un acuerdo y, con la financiación de Penton, KTM fabricó un primer prototipo según las consignas del americano, quien se mostró encantado con el resultado, que derivó en una primera entrega de seis unidades más a principios de 1968. Se trataba de una enduro propulsada por un motor Sachs 2T de 125 cc, con tan solo 103 kg de peso y equipada con una horquilla Ceriani -al contrario de la tendencia de la época de montar un sistema Earless- y amortiguadores de la misma marca italiana. El éxito de aquellas motos, comercializadas bajo la marca Penton, fue inmediato y espectacular (400 unidades vendidas el primer año y 3.000 al siguiente) consiguiendo además Penton la distribución de KTM en los EE UU. Pero KTM se fue tornando recelosa de que su nombre solo apareciera en letras pequeñas cuando aquella moto tan exitosa estaba fabricada en Austria, pese a que en realidad nunca hubiera existido de no ser por la iniciativa y el diseño del americano. Por eso Trunkenpolz fue logrando su propósito, primero vendiendo las Penton bajo el nombre de KTM fuera de América y desarrollando en 1971 un modelo nuevo. Que, si bien continuó vendiéndose en USA con el nombre de Penton, propició que las relaciones se fueran enfriando (de hecho, Penton influía cada vez menos en el desarrollo de la moto) hasta que, en 1978, KTM se hizo plenamente con los derechos, desapareciendo la denominación Penton de las motos. MV Texto y fotos: JOAN CARLES ORENGO . Motocicleta en estado original propiedad del MUSEU DE LA MOTO DE BASSELLA.