MUGELLO SEGÚN EL AÑORADO SIMONCELLI
Hace siete años, el jueves del GP de Italia de 2011, tuve el honor de darme una vuelta muy especial al fantástico trazado de Mugello con el añorado Marco Simoncelli como guía, de paquete con él en scooter. La idea surgió después de que en la cita de Silverstone, que reaparecía en el calendario tras muchos años, a Lorenzo se le ocurriera invitar a algunos periodistas a dar una vuelta con él en aquella pista. A mí no me lo ofreció, porque estaba enfurruñado en esos momentos al defender yo que en Portugal había cargado las tintas sin razón contra Simoncelli. Así, a modo de vendetta por “el feo de Silverstone”, a mi amigo Borja González se le ocurrió que tenía que hacer un reportaje similar con SuperSic al llegar a Mugello, algo que poco después supe que, en efecto, no le hizo gracia al mallorquín. Sin embargo, lo importante es que salió un reportaje fantástico, aderezado con unas fotos increíbles de Jaime Olivares, y que por las circunstancias que todos imaginaréis guardo en la memoria y en el disco duro con un cariño especial.
No hay aquí espacio sufi ciente para reproducir todos los secretos que reveló Marco del difícil trazado toscano, pero hay que repescar algunos como sea. Así veía él la fuerte frenada de San
"La primera curva es divertida, se llega a 330 km/ h. Hay un desnivel en el asfalto, en el que se levanta la rueda con la MotoGP"
Donato: “La primera curva es divertida, porque se llega a 330 km/ h. Hay un pequeño desnivel en el asfalto, en el que se levanta la rueda con la MotoGP poco antes de la frenada. Frenamos a 200 metros y es realmente excitante. Pasamos de sexta marcha a segunda para hacer San Donato a sólo 90 km/ h. Aunque pueda parecer lo contrario, no da miedo y es muy divertido. Esta primera curva es en desnivel y hay que intentar salir rápido de ella, pero sin abrirte demasiado porque enseguida viene la ese de izquierda a derecha, que empieza con Luco y acaba con el Poggio Secco, que es la zona en la que se pone la gente del Fan Club de Rossi. Yo aún no tengo uno, aunque pienso que se creará próximamente. Mis afi cionados andan repartidos por todos los sitios del circuito, pero también siento el calor de los tifosi”.
Casanova y Savelli las describía como “dos enlazadas de derecha a izquierda en bajada”. Aquí comienza la parte más bonita del circuito, ligadas a las dos Arrabbiata, la 1 y la 2, y seguramente el tramo más bonito de todos los circuitos del Mundial. No hay visibilidad en la entrada a Casanova y la tienes que tener en la cabeza para no cometer errores. Se hace en segunda, a 135 km/ h, y a la salida levantas la moto y giras para entrar en Savelli, divisando ya la primera de las Arrabbiata. En este punto hay que mantener siempre la trazada por el centro de la pista, para tirarte en subida a por la primera Arrabbiata, a unos 175 kh/ h, en tercera. A la salida de ella, la rueda trasera patina y te subes al piano, llegando en seguida a la Arrabbiata 2, de tercera a 160 km/ h. Es muy difícil, porque es ciega y te puedes ir largo con facilidad”.
De Bucine, la curva de entrada a meta, aseguraba que “es la curva en la que se deciden muchas carreras por ser la última. Hay que cerrar la puerta bien y salir fuerte”. Y de vuelta a la recta de meta, remató con un resumen y una broma, porque había tirado poco antes a Pedrosa en Le Mans: “Pues esto es Mugello, uno de los circuitos más hermosos y completos. Lo tiene todo y quizá el más parecido sea MotorLand, aunque es algo más lento. Un circuito único y en el que, como te prometí, no te he tirado aunque seas español... A mí nunca me gusta tirar a nadie y no quiero cometer más errores”. ¡ Qué grande era el # 58!