PUIG CON LORENZO, LAS VUELTAS QUE DA LA VIDA
Lorenzo y Pedrosa mantienen desde hace varias temporadas una relación cordial, pero no siempre fue así, ni mucho menos. Crecieron con una agria rivalidad entre ellos que iba mucho más allá de lo deportivo, con momentos muy calientes en la temporada que coincidieron en 250cc, la de 2005, con explosión atómica tras el toque de Alemania, y en los primeros pasos del mallorquín en MotoGP, categoría a la que el catalán llegó dos años antes y en la que Jorge le acabó pasando defi nitivamente por encima. Aquellos tensos piques estaban alimentados por la guerra que había entre los representantes de ambos, Amatriaín y Puig. El fuego cruzado entre las dos trincheras era permanente y las balas nos alcanzaban en ocasiones hasta a los periodistas, pero hace tiempo ya que “Amatra” desapareció de la escena mundialista y que Alberto rompió con su pupilo. Ambas circunstancias no extrañaron a casi nadie, porque era algo que se veía venir, pero lo que absolutamente nadie habría podido creerse hace unos años es que Puig acabaría fi chando a Lorenzo y, además, para sustituir precisamente a Pedrosa en el box de su equipo. Las vueltas que da la vida, ¿ no? Lorenzo sonríe cuando se le comenta
En su acuerdo ha sido esencial la honestidad que han tenido Jorge y Alberto a la hora de afrontar este desafío
tal circunstancia y prefi ere no decir mucho sobre ello, porque aún se debe a Ducati hasta fi nal de temporada. Puig, por su parte, no dice nada con la grabadora encendida, pero sabemos que tenía muy claro que un campeón como el mallorquín no podía quedarse sin moto, que lo veía como un mirlo blanco y que ya verá cómo se las apaña para lidiar con dos gallos al mismo tiempo en su box. Suceda lo que suceda después, el de HRC entiende que esta es una apuesta que debía hacer, porque contar con un dream team formado por Márquez y Lorenzo, con los colores de Repsol Honda, sólo estaba a su alcance y no se habría perdonado perder semejante ocasión. Sólo el tiempo dirá si esta dupla es mejor que la formada por Lorenzo con Rossi, pero la pinta es espectacular.
En su acuerdo ha sido esencial la honestidad que han tenido el uno con el otro a la hora de afrontar este desafío y la llamada que le hizo Jorge a Alberto después de Le Mans, donde supo defi nitivamente que no seguiría en Ducati al acabar el curso. Hubiera pagado dinero por escuchar esa conversación. El mallorquín nos ha reconocido que le habló con el corazón en la mano, de piloto a piloto, para mostrarle la motivación que tenía de ser competitivo con la Honda si le daba la oportunidad de subirse a ella. Alberto, que de tonto no tiene un pelo y que sabe lo bueno que es Jorge incluso desde la época en la que le tenía como enemigo, se dejó convencer y en Mugello le dio el OK y fi rmaron el contrato antes de la carrera que luego venció su fl amante fi chaje.
Otro detalle a tener en cuenta es lo tremendamente bien que supieron llevar en secreto las negociaciones, porque nos pilló en fuera de juego a la prensa. La Gazzetta fue la que disparó primero el martes posterior a Italia, antes de que Honda anunciara que no renovaría a Pedrosa. Unos días antes Lorenzo lo tenía hecho para subirse a la Yamaha satélite con apoyo de fábrica, pero a la hora de la verdad eso sólo fue un plan alternativo al que no tuvo que recurrir. La ambición real era otra y la consiguió. Será un placer verle al lado de Márquez y con las mismas armas. Ahora lo que está por ver es qué hace Pedrosa, al que algunos han querido retirar antes de tiempo. La de la retirada es una opción real, pero no la única.