Análisis MotoGP.
EL MUNDIAL 2018 SE DECIDIÓ EN JAPÓN, CON TRES CARRERAS DE MARGEN, Y
aunque contó con un piloto dominador, no se puede decir que fuera aburrido. Márquez partía como el rival a batir y no dio muchas opciones a sus rivales. Es muy osado decir que Marc ha alcanzado el cénit de su carrera, porque como cuando rueda pista, es muy difícil encontrar sus límites, pero sí que se halla en plena madurez deportiva. Rápido y agresivo casi siempre, metódico y calculador las veces que ha tocado, y en perfecta sintonía con su Honda. La simbiosis con su moto es tal que sus salvadas ya no son noticia, porque son varias las que hace en cada Gran Premio. Siempre al límite, siempre en el alambre, y con el único "debe" de las caídas, donde este año también ha liderado la clasificación en la clase reina con 23, cuatro menos que en 2017, pero todavía demasiadas por el riesgo que supone irse al suelo con una MotoGP.
La constancia ha sido su gran baza en 2018, porque Márquez siempre estaba ahí. Delante. En cada entrenamiento y en cada carrera. Una constancia ganadora con la que se ha coronado campeón de MotoGP por quinta vez en seis años y sin bajarse del podio… Siempre que ha puntuado. Quitando el 2014, el año de los récords, ha conseguido los mejores números de su carrera. En 18 GG. PP ( sin contar la carrera cancelada de Silvestone) ha sumado nueve victorias, cuatro segundos puestos y un tercero. Y dos de los cuatro ceros de la temporada fueron con el título ya en el bolsillo ( Australia y Valencia).
Después de cambiar el concepto del motor en 2017, el proyecto HRC de este año era continuista, sin grandes cambios pero sí mejoras en algunos puntos concretos, como en la aceleración. Y quedó demostrado en el primer GP del año, cuando era capaz de seguir a la Ducati de Dovi con el rebufo. Ya avisaba entonces Márquez de que este año irían mejor en los circuitos donde solían sufrir en el pasado, a costa de perder algo en los favorables. Esto lo vimos cuando el campeonato aterrizó en Europa, con las victorias de Jerez y Le Mans, donde se afianzó en lo alto de la tabla. Además, mantuvo inexpugnables sus plazas fuertes, como Austin, Sachsenring o MotorLand.
La Honda sigue siendo una moto crítica y difícil, que a día de hoy sólo Márquez es capaz de exprimir todo su potencial. Qué se lo digan a Crutchlow o a Pedrosa, que con su misma RC213V acabaron el año a 173 y 204 puntos respectivamente. Quedan aspectos por pulir, como el hecho de que siempre se hayan visto obligados a utilizar el compuesto delantero más duro. Pero con el # 93 en ese box, el tándem Márquez- Honda ha sido el mejor, de largo, del campeonato. Gracias a él, han vuelto a ganar la Triple Corona: título de Pilotos, de Constructores y de Equipos.
LA ALTERNATIVA
Las Ducati subieron la apuesta esta temporada y mejoraron los números del año pasado, que ya fueron excelentes. Pero esta vez el peso de los éxitos no sólo recayó en Dovizioso, sino que estuvo repartido entre los dos pilotos oficiales. En total lograron siete victorias, una más que en 2017, lo que indica que la marca no deja de crecer desde que llegó Dall’Igna a ese box. No tuvieron la constancia del campeón, especialmente Lorenzo que vivió una temporada de altibajos muy pronunciados. Se le atragantó el inicio, fue el mejor entre Mugello y Austria, cuando llegaron sus tres victorias, y desapareció en el tramo final, condicionado por las lesiones.
Aunque en el mejor momento de Lorenzo llegó a estar por delante de su compañero en la clasificación, al final fue Dovizioso al que le tocó disputarle el título a Marc. Si en 2017 fue capaz de llegar con opciones a Valencia, este año ha acabado a 76 puntos del campeón
y con dos victorias menos. El italiano ha estado más fallón que en el pasado, pero en plena Era Márquez se ha hecho con su segundo subcampeonato consecutivo, o lo que es lo mismo, el primero de los mortales. Ha vuelto a protagonizar duelos hasta la última curva con Márquez, aunque este año la balanza ha caído del lado del español. Dovi ganó en Qatar, Marc en Tailandia, y podríamos considerar el desempate la carrera de Japón, cuando el italiano se fue al suelo en la penúltima vuelta.
Su último bienio en MotoGP le ha granjeado un nombre entre los grandes, además de un suculento nuevo contrato con Ducati, ya con números de estrella. Todo lo bien que se gestó la renovación de Dovizioso, falló en la negociación con Lorenzo. El inicio de temporada del balear, muy por debajo de lo esperado, le condenó en Borgo Panigale, y cuando se dejó entrever el potencial del tándem Lorenzo- Ducati ya era demasiado tarde… Claudio Domenicali se cargó al tricampeón de MotoGP, con la opinión contraria de la cúpula de las carreras ( Ciabatti, Tardozzi y Dall’Igna). Y Honda estuvo viva para firmar al balear ( sin veto de Márquez), en lo que supuso un auténtico terremoto mediático.
El mercado de fichajes fue uno de los grandes animadores de la temporada. Desde que se "institucionalizó" el contrato de dos años para pilotos de fábrica, tenemos un año tranquilo y otro revuelto. Hubo un momento donde la acción en pista y en los despachos acaparó la misma atención. Pero eso fue muy a principio de temporada, porque los tiempos de este año ha sido una locura. Abrió la veda Viñales anunciando su renovación en la presentación de su equipo ¡ en enero! Márquez dejó atado su futuro en febrero y Rossi en la carrera de Qatar. Antes del ecuador de la temporada ya estaban asignadas todas las MotoGP de 2019, y los mayores perjudicados fueron pilotos como Lorenzo, Iannone o el propio Bautista, que no estará en MotoGP la próxima temporada por un pobre arranque de año en Qatar, Argentina y Texas. Tanto revuelo llegó a hacer que se debatiera la conveniencia de establecer ventanas de fichajes en unas fechas determinadas.
LA SALIDA DE LORENZO DE DUCATI HA TENIDO MUCHOS DETRACTORES
LA TERCERA MOTOGP
Rossi y Viñales acabaron por delante de Rins y Iannone en la general, y Yamaha fue tercera en la clasificación de Constructores. Aun así, no quedó muy claro que la YZR- M1 fuera la tercera MotoGP por delante de la Suzuki. O al menos que lo fuera toda la temporada. Frente a la constancia ganadora de Márquez, las Yamaha han sido regulares, y nada más… Se quedaron muy cerca de firmar un nefasto un año en blanco, sino fuera por la victoria de Viñales en Phillip Island, pero de lo que no se libraron es de batir su racha negativa histórica sin victorias en MotoGP, que se amplió a 25.
Fue un año tormentoso en el box azul, que no fue capaz de solucionar los problemas de base. Más que nada, porque no daban con el problema y durante el año el foco se puso en el chasis, en la electrónica, en los neumáticos y en el motor, que acabó señalado por unanimidad. El climax de esta crisis llegó en Austria, con el perdón público del jefe del proyecto de MotoGP, Kouji Tsuya. A final de año, crecieron tímidamente los brotes verdes en Iwata, demasiado tarde para Valentino Rossi que firmó un año sin victorias, algo que en sus 22 temporadas en el Mundial sólo había ocurrido en su etapa en Ducati.
El gran rendimiento de las Suzuki fue hasta sorprendente, teniendo en cuenta de dónde venían en 2017. Corrieron de nuevo con las concesiones, por no haber subido al podio el año pasado, y quedó clara la importancia de poder desarrollar el propulsor durante la temporada. Desde Hamamatsu llegaron un par de evoluciones en el motor que le permitieron codearse con el "Big
Three". Un buen chasis, probablemente el mejor de la categoría, y la competencia interna hicieron el resto. El duelo dentro del box espoleó tanto a Rins como a Iannone, que sumaron un total de nueve podios, algunos muy cerca del ganador. El quinto puesto final de Rins refleja el gran salto dado por moto y piloto en 2018.
Por detrás de las motos oficiales, se vivió un apasionante campeonato paralelo de Independientes que acabó siendo para Zarco. El francés afianzó su posición en un sólido final de temporada, al mismo tiempo que su principal rival, Crutchlow, estaba en fuera de juego por lesión. El tercero en discordia, Petrucci, que acabó a 14 puntos de Zarco, logró un único podio en Le Mans. También estuvo muy apretado el Rookie del Año, que se llevó Morbidelli, con 4 puntos de margen sobre Syahrin.
Donde también hubo "sorpasso" fue entre KTM y Aprilia. En dos años los austriacos ya no son la peor MotoGP de la parrilla; y además pueden presumir de haber logrado su primer podio en la clase reina gracias a Pol Espargaró. A pesar del subidón final, el año II de KTM ha sido más duro de lo esperado, con lesiones importantes tanto de Pol como del probador Kallio. Donde sí destacaron fue en los despachos, atando a Zarco como piloto oficial, a Pedrosa como probador y asegurándose un equipo satélite en 2019 ( Tech3). En cuanto a Aprilia, ha firmado un año decepcionante del que ni Aleix pudo salvarles. Como pasaba en 2017, sólo contaban con un piloto competitivo, ya que Redding ha estado muy lejos de su compañero. También miran al 2019 con ilusión, con el fichaje soñado de Andrea Iannone.
EL ADIÓS DE PEDROSA
No estarán en la parrilla de MotoGP 2019 algunos nombres importantes de los últimos años como Bautista, Redding o Smith, todos con podios en la categoría. Aunque, sin duda, la retirada más significativa ha sido la de Dani Pedrosa. El piloto catalán anunció que colgaría el mono en Valencia en una multitudinaria rueda de prensa en Alemania. Desgraciadamente, no se puede decir que se vaya por la puerta grande, ya que 2018 ha sido el peor año de su carrera, el único en el que no ha sumado podios ni victorias, y la única vez en sus 18 temporadas donde ha acabado fuera del top 10 en la clasificación final. ¿ Le ha sobrado este año? A nivel de estadísticas, probablemente sí; pero Dani ha elegido el cuándo y el cómo despedirse, y eso no lo puede decir mucha gente. Va a ser muy raro un campeonato sin Pedrosa, pero habrá que acostumbrarse a ello.
En líneas generales, 2018 ha sido un gran año que ha tenido un gran campeón. Y sólo dos días después de echar el telón en Valencia, arrancaba el Mundial 2019, con los primeros test de pretemporada en Valencia. Además de por el título de Márquez, este año se recordará como el último del "pequeño samurái". Por suerte, podemos decir que le vimos correr y ganar durante años. Gracias Dani.
ZARCO SE HA LLEVADO EL PREMIO DE LOS PILOTOS "INDEPENDIENTES"