Condenados a entenderse
Aunque la actividad en pista se ha parado por completo, en los despachos ha seguido su desarrollo natural y sin haberse disputado una sola carrera de MotoGP, Honda ató a Márquez hasta 2024, y los equipos ofi ciales de Yamaha y Suzuki ya tienen cerradas sus alineaciones ofi ciales de cara a las dos próximas temporadas. El ascenso de Fabio Quartararo al equipo de fábrica de Iwata sembraba de dudas la continuidad de Valentino Rossi, pero durante el confi namiento anunció sus intenciones de continuar en 2021. Desde ese momento, su futuro quedó ligado al equipo satélite Yamaha Petronas SRT. Si el italiano quiere continuar, Yamaha quiere que continúe y Petronas quiere hacerle un hueco en su equipo, ¿ dónde está el problema?
Yamaha ya ha asegurado que proveerá a Rossi de una moto con especifi caciones de fábrica para la temporada 2021 ( y si hiciese falta también para la 2022). Pero se supone que la alineación de los pilotos del Petronas SRT es decisión del equipo malasio. Aunque no se entendería que no fuese una decisión consensuada entre fábrica y escudería. Y más tratándose de quien se trata. Yamaha ya conoce las intenciones del piloto.
Y ha trasladado sus propósitos a su equipo satélite. Pero antes de arrancar la negociación entre Rossi y Petronas se han encontrado con otro obstáculo que hay que sortear. ¿ Quién acompañará al piloto en su paso a la escudería satélite?
Es difícil imaginar el box del # 46 sin Bernard Ansiau, Alex Briggs y Gary Coleman, que llevan trabajando con Valentino Rossi desde que debutó en MotoGP en el año 2000; y sin Brent Stephens y Matteo Flamigni, que se unieron en su paso a Yamaha. Ellos cinco, más su inseparable Uccio Salucci, son el núcleo duro de Valentino Rossi, al que esta temporada se une su nuevo jefe de mecánicos, David Muñoz, que sustituye a Silvano Galbusera. En el otro lado del tablero, el Team Manager del Yamaha Petronas SRT, Razlan Razali, pretende mantener a la mayor parte del equipo que debutó en la categoría reina la temporada pasada y que tan buen trabajo hizo. Y he aquí el quid de la cuestión. Durante las negociaciones habrá cesiones en uno y otro lado, pero no llegar a un acuerdo es algo que ni el Petronas SRT, ni Valentino Rossi, ni Yamaha, ni siquiera el campeonato, podrían permitirse. Es por ello que ambas partes están condenadas a entenderse.