Antología técnica
Recetas de ayer
Poseo un 2 CV-6 con 22.000 Km cuyo rendimiento motor me parece extraordinario, aunque la carrocería es algo floja, y el motivo de mi consulta es que me encantaría instalarle un turbo. No sé si es una locura, pero me han llegado noticias de que se han adaptado a coches como el mío, y agradeceré que me asesoren al respecto.
La valoración que hace usted de su coche —rendimiento motor extraordinario y carrocería algo f loja— denota que conoce bien «lo que hay» y sabe aprovecharlo, cosa básica para ser un citroënista satisfecho. Por eso creo que vamos a entendernos sin dif icultad. Sobrealimentar motores mediante turbocompresor resulta muy atractivo porque puede proporcionar resultados espectaculares con relativa facilidad, pero en el 2 CV, pese a lo divertido que sin duda sería ir por ahí dando pasadas con él, no está especialmente indicado. Analicemos las razones. Cigüeñal, bielas y casquillos no tendrían por qué dar problemas, pues el incremento de las cargas puntuales que deberían soportar sería proporcionalmente menor que el aumento de potencia obtenido; pero los pistones, válv ulas y culatas son otro cantar porque al introducir más mezcla en cada ciclo (al fin y al cabo, en eso consiste la sobrealimentación), el calor generado se dispara y para disiparlo toparíamos con una limitación infranqueable: la refrigeración por aire, cuya ef icacia es muy difícil mejorar. Otro inconveniente derivado de la refrigeración es que la relación de compresión nominal de su motor (8,5:1) está ya muy cerca del límite razonable para ev itar la detonación, así que para poder sobrealimentar con una presión que valga la pena habría que rebajarla hasta 7 ó 7,5:1, y hacerlo originaría un nuevo problema: a pocas revoluciones, mientras el turbo aún no soplase eficazmente, menos compresión mermaría los ya pobres bajos de su motor haciendo muy incómoda la conducción. Tendría que olvidar las arrancadas normales y optar entre «salidas agónicas» o «chillando ruedas», e imagine el virtuosismo preciso para arrancar en cuesta cargado. En tales condiciones, ¿cuánto cree que duraría el embrague…? Luego, la gran masa del volante de inercia —necesaria para regularizar el funcionamiento por ser bicilíndrico— mitigaría uno de los mayores encantos del turbo, conocido como «patada». Al brusco incremento de potencia y vigorosa aceleración que sobrevienen con la plena sobrealimentación, no sólo se opondría el freno inercial debido al peso del coche (que no sería grave, ya que es liv iano), sino el debido al volante, que está ahí precisamente para inf luir bastante. Podría seguir haciéndole consideraciones técnicas, pero en vez de ello le inv ito a ref lex ionar: Preser vando una fiabilidad razonable, ¿cuánto cree que podría ganar con un motor tan pequeño y una aerodinámica tan pésima? Un 30% de potencia y un 20% de velocidad ya sería mucho… ¡y supondría unos 8 CV DIN y 20 Km/h! Y con esa mejora, ¿qué puesto ocuparía en el torrente circulatorio actual? Desde luego, no uno de los primeros. Además, usted mismo reconoce que la carrocería —y el chasis, añado yo— es «algo f loja», así que el potenciamiento no le vendría nada bien, amén de poner a prueba dirección, frenos, suspensión y transmisión. Así pues, como a todo lo expuesto hay que añadir el coste de la instalación, termino con una pregunta: ¿cree usted que semejante transformación compensa?