Carrocería e interior
El Escarabajo descapotable lo fabricó el carrocero Karmann en Osnabrück y lo comercializaba Volkswagen a través de su red, lo que explica que se vendieran más de trescientas mil unidades. Como en todos los Escarabajos, el óxido puede ser un problema y para estar seguros de que no lo hay es imprescindible mirar el coche por debajo, especialmente en las planchas que forman el suelo, en los dos largueros laterales que quedan bajo los estribos, en los anclajes de la suspensión trasera y en la unión de las aletas delanteras y traseras.
Por lo que afecta específicamente al descapotable, lo primero que hay que comprobar es que se trata de un auténtico modelo fabricado por Karmann, porque hubo numerosas conversiones generalmente bastas. A partir de 1965, cuando cambia el sistema de numeración del bastidor, en los descapotables el segundo número era un 5, cuando en los coches cerrados podía ser un 1 o un 3. La capota estaba bien hecha pero era relativamente compleja, ya que tenía la capa exterior de lona, un relleno de crin de caballo y una tela interior. Esta capota puede haber encogido, así que hay que asegurarse de que queda bien cerrada y no deja entrar ni agua ni aire. Es normal tener que cambiar las gomas pero el repuesto es fácil de conseguir y no demasiado caro. Una unidad con la capota en mal estado puede ser una buena oportunidad si el precio es justo, ya que hay varios fabricantes que hacen capotas actualmente y no son caras.