Motor Clásico

Carrocería e interior

-

Dado el tipo de coche que es, conviene fijarse en el ajuste de los paneles de la carrocería para asegurarse de que no está descuadrad­o. Con ese mismo objetivo interesa mirar en sitios como debajo de la moqueta del maletero, en el hueco de la rueda de repuesto y en toda la parte visible del chasis al abrir el capó.

Debe tener varios elementos diferentes del cuatro puertas de tracción trasera: capó con aberturas, intermiten­tes delanteros sin color (no naranjas), pilotos traseros oscuros, marco en la placa de matrícula trasera. En las últimas unidades, el alerón trasero no tenía el borde negro de los primeros. Por dentro también hay cambios, pero ahí ya no es normal que hayan modificado piezas como la instrument­ación (sin raya roja en el cuentav ueltas), el salpicader­o o la consola.

Los asientos Recaro no tenían una tapicería resistente, ni la de tejido ni la de cuero. Es muy difícil encontrar un asiento original en buen estado, así que la opción normal es volver a tapizar con un material más o menos semejante al original. En los tracción delantera es normal que apareciera­n grietas en el salpicader­o e incluso que se doblara; también se puede ver en algunos paneles interiores de las puertas delanteras. El salpicader­o del 4x4 es ligerament­e distinto y ocurre con menos frecuencia.

En el repaso a todos los elementos eléctricos, además de los usuales (ventanilla­s, luces o ventilador) también hay que mirar la trampilla del depósito y la iluminació­n interior al abrir las puertas, que a veces fallan. También hay que detenerse en el cableado bajo el capó, que no era de muy buena calidad y envejece mal. De hecho, si el coche da tirones puede ser por la conexión eléctrica de la bomba de gasolina.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain